El peso mexicano, considerado como una de las monedas más estables frente al dólar, podría perder hasta 20 por ciento de su valor, advierte la agencia Moody´s Analytics.
Basada en un modelo que replica las condiciones financieras de las crisis económicas de 2009 y 2020, Moody´s realizó una “corrección deprecatoria” del peso mexicano.
La agencia reconoció que la moneda nacional logró mantenerse estable a pesar del impacto provocado por la pandemia de Covid-19, llegando incluso a apreciarse en algunos momentos frente al dólar.
Sin embargo, el fenómeno del “súper dólar” logró llevar a las monedas de Argentina, Chile y Colombia a niveles mínimos históricos; otras que también sufrieron el mismo efecto fueron la libra esterlina y el euro.
Para argumentar el resultado de su análisis, Moody´s recordó lo que pasó con el peso en la crisis económica de 2009.
En ese entonces se produjo una depreciación inicial al comenzar la recesión, luego vino una ligera revaluación, para después volver a caer de manera similar que al principio.
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Ahora, y como efecto de la pandemia, la moneda mexicana se depreció, pero a mediados de 2021 tuvo una recuperación frente al dólar, por lo que falta su segunda caída:
“La evidencia reciente sugiere que la historia cambiaria parece estarse repitiendo”, indica el análisis de Moody´s.
“El apretamiento monetario en marcha en los Estados Unidos podría detonar una corrección cambiaria como la que sucedió durante el ciclo anterior de alza de tasas por parte de la Reserva Federal (FED) y que inició a finales de 2015. Bajo esta condición, la depreciación del peso mexicano se ve inminente”, indicó Moody´s.
De acuerdo con la agencia, la depreciación del peso mexicano podría ocurrir a finales de 2022, a lo largo de 2023 o hasta 2024, “dependiendo de la velocidad del ciclo de apretamiento monetario por parte de la FED y de la reacción de la política monetaria en México”.
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