Los mismos argumentos de la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador para que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) asuma el “control operativo y administrativo” de la Guardia Nacional, fueron integrados en la minuta con proyecto de decreto que este martes enviaron las Comisiones Dictaminadoras del Senado de la República para su análisis.
En el dictamen de las Comisiones Unidas de Justicia y de Estudios Legislativos Segunda, presididas por la senadora Olga Sánchez Cordero y Rafael Espino, destaca el argumento contradictorio, incluido también en la iniciativa presidencial, sobre el cumplimiento del artículo 21 constitucional que establece a la Guardia Nacional como una institución “de carácter civil, disciplinado y profesional”.
Mientras en la minuta se establece que la creación de la Guardia Nacional “obedeció a la carencia de una corporación nacional de policía profesional y capaz de afrontar el desafío de la inseguridad y la violencia en nuestro país”, el fondo de la propuesta sostiene que la intervención de la Sedena “en la conformación y el control operativo y administrativo” de la GN es “concordante con el respeto a los derechos humanos”.
Lo anterior sustentado por dichas comisiones, sin detallar la fuente, que “de 2019 a 2021, las quejas por violaciones a derechos humanos presentadas contra la Sedena disminuyeron en 9.54 por ciento y las presentadas contra la SEMAR bajaron en 43.3%.
Y aunque sostiene que la disminución de delitos en los últimos tres años se debe “a la eficacia de la Guardia Nacional como modelo policial”, será el “profesionalismo, disciplina e institucionalidad de las Fuerzas Armadas” las que garanticen la “apoliticidad, integridad y obediencia a las autoridades civiles, así como la absoluta sujeción de su actuación a los límites constitucionales”, como también se establece en la iniciativa enviada por el presidente López Obrador el pasado 31 de agosto.
Las evidentes coincidencias entre la iniciativa del mandatario y la minuta de las comisiones dictaminadoras se contraponen con lo señalado por el senador Ricardo Monreal, coordinador de Morena en el Senado, quien anticipó una discusión para la aprobación de la minuta autónoma al Ejecutivo y apegada al “pudor constitucional” de la división de poderes.
“Nosotros no somos el Ejecutivo, somos un poder autónomo. Y que, en la teoría de la división de poderes de Montesquieu, de Hobbes y de Locke, somos un órgano equilibrador. No somos comparsa ni somos apéndice del Ejecutivo. Sí tenemos colaboración y tenemos el mismo origen y vamos a honrar los compromisos que hizo el presidente en campaña, porque somos parte del mismo movimiento, pero tenemos que actuar con pudor constitucional”, sostuvo el legislador al descartar que su aprobación vaya a ser en modo ‘fast track’.
Destacada como el “instrumento primordial” para garantizar la seguridad pública y la aprobación que tiene entre la población, el dictamen de las comisiones subraya el argumento dicho por el presidente López Obrador de que la corporación no busca ser militarizada, sino reforzada.
Además, se acotó que la Guardia Nacional permanecerá adscrita a la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), solo que ahora se pretende sea controlada y administrada por la Defensa Nacional.
