¿Los republicanos podrían perder las elecciones en Texas?

La construcción de un muro fronterizo y la expulsión de migrantes han caracterizado los últimos meses de la gestión de Greg Abbott como gobernador de Texas, y son parte de los temas que más preocupan a sus votantes, pero también son estos los que podrían definir si los republicanos dejen el poder en este estado luego de tres mandatos consecutivos en las próximas elecciones.

Las encuestas a poco más de tres meses de las elecciones marcan una diferencia de sólo el 5 por ciento entre Greg Abbott y el demócrata Beto O’Rourke, quien se ha hecho de un 44 por ciento de las intenciones del voto.

Ese 5 por ciento que distancian a O’Rourke de Greg Abbott, que ostenta un 49 por ciento de las intenciones, de acuerdo con la encuesta de la Escuela de Asuntos Públicos Hobby, es el mismo porcentaje de los votantes que aún están indecisos sobre su voto.

Con 28.64 millones de habitantes, Texas es actualmente el segundo estado más poblado de Estados Unidos, en donde se definirá al próximo gobernador en las elecciones del próximo 8 de noviembre.

Se trata de un estado que ha sido gobernado en los últimos años por el partido republicano. Primero por George W. Bush, de 1995 al 2000; luego por Rick Perry de 2000 al 2015 y desde entonces y hasta la fecha por Greg Abbott.

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Este último se ha caracterizado por su cercanía con el expresidente Donald Trump, cuyo vínculo se ve evidenciado con la construcción de un muro fronterizo para evitar el cruce ilegal de migrantes.

“Texas está construyendo su propia muro fronterizo”, escribió Abbott en una reciente publicación realizada durante el fin de semana. Sin embargo, sus políticas antimigrantes no se limitan a ello, pues el pasado 6 de julio emitió una orden ejecutiva con la cual autoriza a la Guardia Nacional y al Departamento de seguridad Pública a detener indocumentados y devolverlos a la frontera con México.

En su narrativa Greg Abbott a manifestado su rechazo a la política de “fronteras abiertas” de Joe Biden, a quien responsabiliza de la ola de migrantes que llegan al país. Este tipo de argumentos han sido usados por el gobernador texano incluso después de sucesos como la tragedia migrante ocurrida a finales de junio, en la que murieron más de 50 indocumentados en un tráiler abandona en San Antonio.

Sin embargo, son estos temas, junto a la recién instaurada ley que prohíbe el aborto, la cual se remonta a 1925 y las masacres en escuelas, los que podrían definir las elección, al tratarse de temas que los votantes tienen en la mira.

De acuerdo con la encuesta realizada por la Universidad de Texas, los partidarios ven con mayor relevancia temas como la inflación, la migración y seguridad fronteriza y la delincuencia y seguridad pública.

Mientras que los simpatizantes de O’Rourke ven mayor relevancia en temas como los derechos de voto, el control de armas y los costos de la atención médica en el estado.

En el caso de la ley que prohíbe el aborto, reinstaurada por el Tribunal Supremo de Texas hace sólo tres semanas, el 50 por ciento de la población en Texas ha manifestado su rechazo a esta medida, y otro 46 por ciento la apoya.

The New York Times citó al representante estatal demócrata de Austin, James Talarico, quien consideró que el cierre en las encuestas deja ver in “renovado espíritu de lucha” en este estado. No obstante, el diario considera que hay situaciones que también apuntan en contra de los demócratas, como es las percepciones negativas respecto a Joe Biden y la inflación. CJG

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