Redacción ejecentral
El canciller Luis Videgaray informó de manera oficial a la Casa Blanca la “grave preocupación” y el rechazo de México ante la posible adopción de una política para que sean separados de sus familias a los niños que crucen irregularmente la frontera sur del país y sean detenidos por la patrulla fronteriza.
En conferencia de prensa desde la embajada de México en Washington, Videgaray dijo haber expresado asimismo su oposición a la intención de que el gobierno de Donald Trump pretenda deportar a México a inmigrantes de terceros países.
“Las decisiones sobre quiénes entran a México las toma México y solo México”, afirmó el jefe de la diplomacia mexicana. Videgaray sostuvo este jueves reuniones de trabajo con el director del Consejo Nacional Económico de la Casa Blanca, Gary Cohn; con el asesor de Seguridad Nacional, Herbert Raymond McMaster; y con el asesor senior del presidente, Jared Kuschner.
Expresó que es de suma importancia mantener la unidad de las familias mexicanas como cualquier proceso de deportación por parte de autoridades migratorias de Estados Unidos.
En tanto la “respuesta de la Casa Blanca” ante las preocupaciones expresadas por Videgaray fue que solo “están estudiando la posibilidad” de tomar esa medida, “que no es una decisión tomada”, indicó el canciller a los periodistas.
Reiteró en la Casa Blanca su oposición a la política que evalúa el Departamento de Seguridad Nacional para expulsar a México a los inmigrantes indocumentados de cualquier nacionalidad para que tramiten sus peticiones de asilo desde territorio mexicano.
Externó su preocupación del gobierno mexicano por asegurar que, en el ejercicio de sus funciones, las autoridades federales norteamericanas respeten los derechos humanos de los connacionales con independencia de su status migratorio. Por último Videgaray y Caso reiteró que las reuniones con Rex Tillerson continuarán, y que se prepara una en Washington para dentro de dos o tres semanas.