Hasta este año, los medicamentos para controlar el sobrepeso y la obesidad han sido muy poco exitosos; sin embargo, han surgido una nueva clase de terapias farmacológicas para bajar de peso que, además, este año mostraron resultados prometedores para las complicaciones de salud que se derivan de la alta masa corporal, mismos que la revista Science considera como ganadores del premio Avance Científico del 2023 (o premio Science Breakthrough).
Este tipo de medicamentos (que formalmente se llaman agonistas del GLP-1 o péptido similar al glucagón-1) se utilizan desde el 2005 para el tratamiento de la diabetes, y en 2014 se aprobó el primero para su uso en el tratamiento de la obesidad; pero el gran auge comenzó en 2021, cuando se aprobó en Estados Unidos la semaglutida, conocida comercialmente como Wegovy para tratar la obesidad, y como Ozempic para la diabetes.
Padecer obesidad está asociado a riesgos de salud que pueden poner en peligro la vida, como enfermedades cardíacas, diabetes, artritis, enfermedades hepáticas y ciertos cánceres; además, estos problemas a menudo se “entrelazan con la presión social… y la creencia generalizada de que el exceso de peso refleja una fuerza de voluntad débil”, lo cual llega a afectar la salud mental de las personas que tienen el problema, escribe Jennifer Couzin-Frankel en Science, por lo que los beneficios del control de la obesidad se multiplican.
Sin embargo, a pesar de todas sus promesas, para los agonistas del GLP-1 aún no están claros su costo y disponibilidad. “Es probable que estas cuestiones se resuelvan en los próximos años, pero por el momento el acceso a estos medicamentos es limitado. El costo puede superar los mil dólares por mes y no siempre está cubierto por el seguro, si es que se puede conseguir el medicamento”, escribe Holden Thorp en un comentario editorial en Science.
Entre los finalistas del premio Science Breakthrough de 2023 están: las terapias con anticuerpos que retrasan la neurodegeneración en personas con Alzheimer, el descubrimiento de fuentes naturales de hidrógeno bajo la tierra, la confirmación de la profunda antigüedad de las huellas humanas descubiertas en Nuevo México, las nuevas vacunas contra la malaria y las señales interestelares de fusiones masivas de agujeros negros.
