jcrodriguez@ejecentral.com.mx Si el nivel de cumplimiento de las metas y objetivos del gobierno federal fuera tomado en cuenta por el presidente Enrique Peña Nieto para nominar al candidato del PRI a la Presidencia de la República, los que tendrían mayores posibilidades son los secretarios de Turismo, Enrique de la Madrid, y de Hacienda, José Antonio Meade. De acuerdo con el Sistema de Evaluación del Desempeño (SED), una herramienta del gobierno federal para analizar numéricamente el logro de los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo, la secretaría que encabeza De la Madrid Cordero tiene una calificación de 4, en una escala de 1 a 5, donde 1 es desempeño “bajo” y 5 es cumplimiento “alto”.
›El trabajo del hijo del expresidente Miguel de la Madrid, quien ha reconocido públicamente que tiene aspiraciones para contender en la próxima elección presidencial —aunque también se le ha mencionado como posible candidato a la jefatura del Gobierno de la Ciudad de México— fue evaluado en 13 programas, tres de los cuales tienen un nivel “alto”, seis “medio-alto” y cuatro “medio”.
Las fortalezas de la secretaría están en el Programa de Calidad y Atención Integral al Turismo, así como en Conservación y Mantenimiento a Centros Integralmente Planeados. Asimismo, las acciones con calificación “media” fueron Proyectos de Infraestructura de Turismo; Fomento y Promoción de la Inversión en el Sector Turismo, y Regulación y Certificación de Estándares de Calidad Turística. La dependencia no tiene ningún programa con calificación 2 o 1.
Luces y sombras de Hacienda
En segundo lugar, se ubica la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, con una calificación de 3.93. Su titular, José Antonio Meade, llegó al cargo en septiembre del año pasado y su nombre cobró fuerza como presidenciable desde mediados de agosto, cuando el PRI modificó sus estatutos para eliminar el requisito de 10 años de militancia para ser candidato presidencial. Con datos actualizados al segundo trimestre de 2017, el sistema de evaluación analizó 30 programas presupuestales de Hacienda, de los cuales 12 tiene un nivel de desempeño “alto” (con calificación de 5), nueve alcanzan un nivel “medio-alto” (calificación de 4), seis están en el rango de “medio” (calificación de 3) y dos fueron evaluados como “medio-bajo” (calificación de 2). Las mejores notas de Meade están en la Defensa y Protección de los Usuarios de Servicios Financieros; Capacitación para Productores e Intermediarios Financieros Rurales, Conservación del Acervo Patrimonial, Administración de los Fondos y Valores Federales, Administración del Fondo de Pensiones y el Programa de Inclusión Financiera, entre otros. En contraste, las acciones peor evaluadas en Hacienda fueron Administración y Enajenación de Activos y Diseño de Política de Ingresos.
SFP y Marina en el top 5
La tercera secretaría de Estado con mejores notas es la Función Pública, a cargo de Arely Gómez González. Con ocho programas evaluados, ninguno tiene calificación 2 o 1. Los mejores resultados los obtuvo en Apoyo al Proceso Presupuestario para Mejorar la Eficiencia Institucional; Inhibición y Sanción de las Prácticas de Corrupción; Integración de las Estructuras Profesionales de Gobierno, y Promoción de la Cultura de la Legalidad y el Aprecio por la Rendición de Cuentas. En la cuarta posición está la Secretaría de Marina, a cargo del almirante Francisco Vidal Soberón Sanz. De los ocho programas sometidos a escrutinio, uno obtuvo calificación de 5, cinco lograron el 4, uno tuvo 3 y uno más 2. Las áreas de oportunidad para la Marina están en Administración y Fomento de los Servicios, y en Mantenimiento de Infraestructura, mientras que las fortalezas están en Procesos Presupuestarios para Mejorar la Eficiencia Institucional, Mantenimientos de Unidades Navales, Proyectos de Infraestructura Gubernamental de Seguridad Nacional y Sistema Educativo Naval.
Gobierno por debajo del medio
El Sistema de Evaluación del Desempeño es una plataforma del gobierno federal que permite saber cómo van los programas presupuestarios con el propósito de medir si se están cumpliendo los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo. “A través del SED, se enfocan las funciones del gobierno a la mejora en entrega de bienes y servicios a la población, se eleva la calidad del gasto público y se promueve la rendición de cuentas”, refiere el portal de internet del sistema. En términos globales, el presidente Peña Nieto llega a su Quinto Informe de Gobierno con una calificación de 2.8, es decir, con un desempeño por debajo del “medio”. De un total de 691 programas que analiza la plataforma gubernamental, 100 tienen un desempeño “alto”, 213 fueron evaluados como “medio-alto”, 184 están en el rango de “medio”, 36 tienen una calificación de “medio-bajo” y ocho están en nivel “bajo”. Sin que se explique la razón, 150 programas de la administración pública federal no fueron evaluados.
›Entre las mayores debilidades del gobierno federal están dos instrumentos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Programa de Seguridad Pública e Investigación, Desarrollo y Producción de Vestuario y Equipo Militar), y dos de la Secretaría de Desarrollo Social (Promoción y Evaluación de la Política de Desarrollo Social y Comunitario, la Participación y la Cohesión Social, y Proyectos de Inmuebles).
Otros proyectos con la mínima calificación son Política de Desarrollo Urbano y Ordenamiento del Territorio (de la Sedatu), Mantenimiento de Infraestructura (a cargo de la PGR) y Sistema de Transporte Colectivo (dependiente de la Dirección General de Transporte Ferroviario y Multimodal de la SCT).
Sedatu y PGR, las peores
La integrante del gabinete que más le ha quedado a deber al presidente Peña Nieto en el logro de metas gubernamentales en el último año es Rosario Robles, pues la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) es la que tiene la calificación más baja: 2.9. De los 19 programas presupuestales evaluados por el SED, sólo una tiene calificación de 5, mientras otra tiene la mínima calificación y tres tienen una nota de 2. Las acciones donde Sedatu tiene mayores problemas de rendimiento son Obligaciones Jurídicas Ineludibles y Actividades de Apoyo para Mejorar la Eficiencia Institucional. En el penúltimo lugar de la tabla está el procurador general de la República, Raúl Cervantes Andrade, quien llegó al cargo el 26 de octubre del año pasado en sustitución de Arely Gómez. Entre las fragilidades de la dependencia está el Mantenimiento de Infraestructura; Investigación Académica en el Marco de las Ciencias Penales; Investigación, Seguimiento y Prevención de Delitos Electorales, y Proyectos de Infraestructura Gubernamental de Procuración de Justicia.