Mientras el presidente, Andrés Manuel López Obrador, hacía entrega de los Programas Integrales de Bienestar, la exigencia del pueblo de Uruapan era otro: la seguridad, el precio del combustible y la CNTE.
En los últimos dos sexenios, Michoacán ha sido víctima de la presencia de grupos de la delincuencia organizada, lo que ha traído inseguridad, alza de homicidios y otros delitos.
Michoacán fue justo la entidad donde el expresidente Felipe Calderón, el 10 de diciembre de 2006, dio arranque al programa Operativo Conjunto Michoacán, más tarde conocido como la declaración de guerra al narcotráfico, que desde el inicio los resultados fueron adversos.
La estrategia iniciada por el panista y continuada por Enrique Peña Nieto trajo a la entidad la mayor cantidad de militares y fuerzas federales acaecidos en la lucha contra el descabezamiento de La Familia Michoacán y Los Caballeros Templarios, grupos criminales que tuvieron su auge durante 2013, y que dieron paso a la creación del “Movimiento Legítimo de Autodefensa”, con lo que iniciaría una disputa de violencia y pugna.
Este movimiento dejó algunos presos políticos, entre ellos José Manuel Mireles, uno de los iniciadores del movimiento, y que desde una de las islas de invitados pudo escuchar el discurso del mandatario en Uruapan.
Aunque en esos años se logró la detención de las principales cabecillas criminales, la entidad mantiene presencia de organizaciones delictivas, seña de ello fue que en 2018 cerró con el mayor índice delictivo comparado con años anteriores, al sumar más de 25 mil delitos, entre estos los homicidios, lesiones dolosas y feminicidios.
A las organizaciones antagónicas se unió el Cártel Jalisco Nueva Generación en su ingreso a la entidad, lo que ha aumentado los niveles de delincuencia y violencia en Michoacán.
La inseguridad afecta a todos. “La gente ya no va a las ferias por miedo”, dice Alfredo, un encargado de juegos mecánicos y que asegura que ya no les alcanza, porque casi no va gente a estos eventos y no logran sacar el gasto.
Un grupo de cerca de 15 personas llenaron dos vehículos con cartulinas en las que se exige al mandatario que “se ponga a trabajar”.
Todos propietarios de juegos mecánicos o puestos de comida en ferias y festividades, coincidieron que López Obrador “cree que todavía está en campaña”, pero ya no y es necesario que ya cumpla lo que tanto prometió.
Con frases como: “Se cansó el ganso”, “el ganso no cumple”, “se te fue el avión, no lo vendiste”, los comerciantes pedían que se garantice la seguridad no sólo en Uruapan sino en la entidad, para que las personas vuelvan a salir con tranquilidad.
Gasolina y la CNTE
Aunque fue su promesa de campaña, el presidente López Obrador no ha logrado que el precio de la gasolina logre una disminución significativa, exigencia que le han externado de sur a norte del país.
En la última semana, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) ha elevado los estímulos fiscales a la gasolina, para que los ciudadanos paguen menos Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) por cada litro de combustible adquirido.
Esto no ha sido suficiente, pues en algunas regiones del país, la disminución que no sobrepasa los 1.62 pesos, no ha sido notoria. Como en Uruapan, donde el litro de gasolina Magna está en 19.76 pesos; la Premium se vende hasta en 21.02 pesos por litro; y el Diésel hasta 21.33 cada litro.
Desde el inicio de la estrategia contra el robo de combustible, el costo y la accesibilidad se han dificultado en Michoacán, pero también los bloqueos y manifestaciones de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE).
En febrero de 2013, cuando fue constitucionalizada la Reforma Educativa, la CNTE emprendió acciones para su cancelación, entre las que destacan los bloqueos carreteros, manifestaciones en cada estado y convocatorias nacionales para marchar en la Ciudad de México.
Pese a que el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió con el magisterio a cancelar la “mal llamada” reforma educativa, los maestros han continuado sus acciones. En las últimas semanas han impedido el acceso de diputados y senadores a sus respectivas cámaras para discutir justamente las modificaciones a la reforma, pues exigen que se elimine completamente y no que se haga a modo.
Una de los movimientos que generó mayores pérdidas y problemas no sólo a Michoacán, sino a empresarios y a la ciudadanía en general, se dio el pasado mes de enero y que se extendió hasta febrero.
Integrantes de la CNTE bloquearon por cerca de 25 días las vías férreas que cruzan la entidad, causando 387 trenes sin cargar, 3.3 millones de toneladas sin transportar y una pérdida de económica de cerca de 25 mil millones de pesos.
Los michoacanos no exigen algo imposible, sólo quieren seguridad para sus familias y que el Presidente de México cumpla lo que prometió en campaña.
