Los robots se apoderan del mundo
El aumento en la instalación de robots en la industria y servicios mostró desde 2018 una tendencia al alza; en sólo dos años se esperaba instalar un millón más, pero la epidemia Covid-19, podría resultar una opción más atractiva para las empresas
Asia y Australia llevan la delantera. En estos dos continentes se instalarán, en los próximos años la mayor cantidad de robots industriales, aunque la pandemia podría acelerar este proceso e incrementar su número en algunos sectores.
La Federación Internacional de Robótica (IFR, por sus siglas en inglés) estimaba a finales del año pasado que hasta 2021 se instalarían alrededor de un millón de estos robots en diferentes países. Sólo en este año esperaban 465 mil y para el próximo 522 mil.
Al ejército de autómatas operativos en fábricas se deben añadir aquellos robots que proveen servicios en vez de fabricar productos, como los dedicados a logística, defensa o salud.
De acuerdo con el portal de estadísticas mundiales Statista, está por definirse cómo la pandemia del nuevo coronavirus modificará las proyecciones, sobre el número de autómatas, aunque algunos expertos adelantan un mayor despliegue de robots producto de la misma epidemia.
Según la IFR, el valor operativo de los robots está calculado en dos millones 439 mil 543 unidades (+ 15%). Sin embargo, hay que considerar que Asia es el mercado de robots industriales más grande del mundo, aunque el crecimiento se desaceleró sustancialmente desde 2018. No obstante, dos de cada tres robots (67%) recién implementados en 2018 se instalaron en el continente asiático.
En tanto, la instalación de robots en el segundo mercado más grande, la región del continente europeo, aumentó 14%; es decir en 75 mil 560 unidades, un nuevo pico por sexto año consecutivo, por lo que la tasa de crecimiento promedio anual de 2013 a 2018 correspondió a 12 por ciento.
En la región del continente americano, la tasa de crecimiento fue aún mayor con la instalación de 55 mil 212 robots durante 2018; es decir, 20% más que el año anterior, además, al igual que Asia y Europa, tuvo un nuevo pico por sexto año consecutivo, según la IFR.
