jcrodriguez@ejecentral.com.mx La corrupción produjo más pobres en seis estados. El desvío de recursos, el tráfico de influencias, los subejercicios y la creación de empresas fantasmas dañaron al erario y frenaron el desarrollo económico, pero también causaron una expansión de la miseria. Eso quedó demostrado con las gestiones de Javier Duarte en Veracruz, César Duarte en Chihuahua, Roberto Borge en Quintana Roo, Gabino Cué en Oaxaca, Rodrigo Medina en Nuevo León y Roberto Sandoval en Nayarit, todos ellos con investigaciones o procesos judiciales abiertos por el mal desempeño del cargo y mal manejo de los recursos públicos. Con el reporte sobre medición de la pobreza 2016, dado a conocer el pasado 30 de agosto por el Coneval, ya es posible analizar la gestión completa de los gobernadores que integran la llamada “generación perdida” y dimensionar en su totalidad la herencia que dejaron en materia de desarrollo social. En 2010, cuando los seis gobernadores iniciaban sus gestiones, en las seis entidades había 10 millones 342 mil 200 personas en pobreza. Un sexenio después, al término de sus respectivos mandatos, el número aumentó a 10 millones 725 mil 700 personas. Es decir, con esos seis gobiernos, 383 mil 500 personas ingresaron a las filas de la pobreza. A escala nacional, el número de personas que tienen un ingreso inferior a la línea de bienestar mínimo pasó de 22.2 millones en 2010 a 21.4 millones en 2016. Moderada, pero hubo una reducción. Sin embargo, al enfocar ese análisis en los seis estados con estos seis gobernadores se advierte un deterioro. En 2010, los habitantes de Chihuahua, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo y Veracruz que vivían con menos de lo mínimo indispensable para subsistir eran 4 millones 781 mil 700. En 2016, la cifra se elevó a 5 millones 45 mil 800, según Coneval. Conclusión: los Duarte, Borge, Cué, Sandoval y Medina provocaron que el ingreso de 264 mil 100 mexicanos cayeran, al grado de no tener para adquirir los mínimos satisfactores. El acceso a la alimentación también se vio mermado durante la gestión de los seis exmandatarios. A nivel nacional, el número de personas que pasaban hambre —por no tener ingresos suficientes para una alimentación sana y suficiente— bajó de 28.4 millones en 2010 a 24.5 millones en 2016. No obstante, en estos seis estados hubo un incremento de 4 millones 966 mil 300 personas hambrientas en 2010, a 5 millones 18 mil 600 en 2016, lo que implica 52 mil 300 personas adicionales que carecen de acceso al alimento.
Pobres extremos
En materia de pobreza extrema (aquellas personas cuyo ingreso no les alcanza para comer, aun cuando destinaran todos sus ingresos para alimentación), en 2010 había 3 millones 81 mil personas en esas condiciones en Chihuahua, Nayarit, Nuevo León, Oaxaca, Quintana Roo y Veracruz. A la vuelta de seis años, la cifra se redujo a 2 millones 740 mil 600, lo que significa que 340 mil 400 personas salieron de la pobreza extrema. Dicha reducción equivale a 11%, menos de la mitad del promedio nacional en este mismo lapso, que fue de 27.6 por ciento. Pero la corrupción tiene un costo oculto que afecta la economía de las familias mexicanas, quienes tienen que gastar entre 14% y 34% de sus ingresos para pagar servicios que debería proveer el Estado mexicano, o a funcionarios públicos para que hagan su trabajo, de acuerdo con el estudio Anatomía de la Corrupción, elaborado por la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad. El presidente de dicho organismo, Claudio X. González Guajardo, ha dicho que “la corrupción nos hace perder competitividad internacional, hace que la gente se ahuyente. No llega la inversión extranjera, tecnología y conocimiento en la cantidad que necesitamos porque no existen las condiciones de seguridad física, patrimonial y jurídica para hacer negocios más grandes en nuestro país”. En materia de salud, la mala conducción de los gobiernos estatales también tuvo repercusiones. Entre 2010 y 2016 hubo 125 mil 400 personas que se sumaron al grupo de los que no tienen acceso a la seguridad social. Y lo mismo ocurrió en materia de acceso a los servicios básicos en la vivienda. Mientras que en 2010 había seis millones 70 mil personas que en los seis estados en cuestión carecían de agua potable, energía eléctrica y drenaje, para 2016 la cifra se elevó a seis millones 585 mil personas, lo que equivale a medio millón de personas adicionales. 1. VERACRUZ Fábrica de pobres Javier Duarte de Ochoa asumió el cargo de gobernador el 1 de diciembre de 2010 y pidió licencia el 12 de octubre de 2016, 49 días antes de que concluyera su mandato. Oficialmente se le acusa del desviar 282 millones de pesos del erario estatal, pero la Auditoría Superior de la Federación (ASF) ha documentado anomalías superiores a los 60 mil millones de pesos. Con una población de 8.1 millones de habitantes, Veracruz es la entidad donde más ha crecido la pobreza en la última década. Mientras que en 2010 había cuatro millones 448 mil personas en la pobreza, para 2016 la miseria afectaba ya a 5 millones 49 mil 511 veracruzanos, es decir, hubo un incremento de 601 mil 548 personas con carencias. Uno de sus mayores logros fue reducir el número de personas con carencias por acceso a los servicios de salud y bajar el déficit de vivienda con calidad. Sin embargo, tiene saldos negativos en rezago educativo, vulnerabilidad por ingresos y servicios básicos en la vivienda. 2. CHIHUAHUA El alimento no es para todos César Duarte Jáquez gobernó Chihuahua entre el 4 de octubre de 2010 y el 3 de octubre de 2016. Actualmente es prófugo de la justicia, luego de que en marzo pasado un juez le girara orden de aprehensión por el delito de peculado. Al exmandatario se le señala por elevar la deuda del estado, comprometer los ingresos carreteros y retener salarios de los empleados del estado para financiar la campaña del PRI. También están en curso denuncias por enriquecimiento ilícito y ejercicio abusivo de funciones. Si bien tras la gestión de Duarte hay 221 mil pobres y 111 pobres extremos menos, también es cierto que se incrementó en 220 mil la cifra de personas vulnerables por carencias sociales, en 26 mil 200 la de chihuahuenses con rezago educativo y en 40 mil la de personas que carecen de una vivienda de calidad. Según cifras del Coneval, con César Duarte de se elevó en 58 mil 400 el número de personas con hambre. 3. QUINTANA ROO Viviendas sin servicios básicos El priista Roberto Borge Angulo se convirtió en gobernador de Quintana Roo el 5 de abril de 2011 y su mandato concluyó el 24 de septiembre de 2016. Una de las primeras acciones de su sucesor, Carlos Joaquín González, fue someterlo a investigación y presentar una denuncia ante la PGR en la que acusa a Borge de vender a familiares amigos cientos reservas territoriales a precios irrisorios y de desviar recursos públicos. El 3 de junio fue girada una orden de aprehensión contra el exmandatario por lavado de dinero. Borge fue detenido el 4 de junio en Panamá. Si bien durante su gestión 700 personas lograron salir de la pobreza y 18 mil de la pobreza extrema, datos del Coneval refieren que tras la gestión de Borge 136 mil personas se sumaron al rubro de quienes sufre vulnerabilidad por carencias sociales y 5 mil 800 ingresaron al renglón de vulnerables por ingresos. Cuando Borge llegó, 732 mil 468 personas sufrían falta de acceso a la seguridad social; cuando Borge se fue ya eran casi 800 mil. Cuando el priista llegó, 207 mil personas carecían de servicios básicos en la vivienda; cuando él se fue ya eran 318 mil 400. 4. OAXACA Aumenta población con hambre Producto de una alianza PAN-PRD-PT- Movimiento Ciudadano, Gabino Cué llegó a la gubernatura de Oaxaca el 1 de diciembre de 2010 y concluyó su gestión el 30 de noviembre de 2016. Actualmente, el Congreso analiza una petición de juicio político contra el exmandatario por el delito de desfalco. Cué es señalado de haber creado 600 empresas fantasmas para el desvío de recursos y es señalado por el Comité de Planeación para el Desarrollo de Oaxaca de no haber comprobado el uso de de 428 mil millones de pesos durante todo su sexenio. Durante la administración de Cué 251 mil personas engrosaron las filas de la pobreza y otras 44 mil ingresaron al rubro de vulnerables por bajos ingresos. Y el número de personas que no tienen servicios básicos en la vivienda se incrementó en 257 mil personas, el de oaxaqueños sin acceso a la alimentación se elevó en 246 mil y los que tienen ingresos inferiores al bienestar mínimo subió en 223 mil. 5. NUEVO LEÓN Se multiplican las carencias sociales Rodrigo Medina de la Cruz fue gobernador de Nuevo León entre el 4 de octubre de 2009 y el 3 de octubre de 2015, cuando fue relevado por Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, que llegó al cargo por la vía independiente. Derivado de la “Operación Tornado”, Medina fue acusado de peculado, delitos patrimoniales, ejercicio indebido del servicio público, abuso de funciones junto a otros 14 servidores públicos. Con la gestión de Medina, 256 mil 600 habitantes del estado lograron salir de la pobreza, así como 54 mil 900 personas de la pobreza extrema. También logró abatir el rezago educativo, la falta de acceso a los servicios de salud, la falta de vivienda de calidad y la carencia de servicios básicos en el hogar. Sus puntos débiles se ubican en la vulnerabilidad por carencias sociales, pues 294 mil personas ingresaron a esa categoría durante su gestión, y el acceso a la alimentación, pues durante su administración 38 mil personas se sumaron a la lista de personas con hambre. 6. NAYARIT Hay más pobres extremos El gobernador saliente de Nayarit, Roberto Sandoval Castañeda, llegó al cargo el 19 de septiembre de 2011 y su gestión termina el próximo 18 de septiembre. El 23 de agosto, el gobierno de Estados Unidos le retiró la visa, en un indicio de que en existe una investigación en su contra, luego de que su exfiscal, Édgar Veytia, fuera detenido en marzo acusado del tráfico del mariguana, heroína, cocaína y metanfetaminas. También enfrenta acusaciones por enriquecimiento ilícito, pues presuntamente posee una cuadrilla de caballos pura sangre, cuya adquisición, transportación y mantenimiento se ha realizado con el desvío de recursos públicos. Tras la gestión de Sandoval, prácticamente todos los rubros de la política social son negativos. La cifra de pobres subió de 461 mil 241 a 470 mil. Y, junto con Colima, es el único estado donde la pobreza extrema creció entre 2010 y 2016. Cuando Sandoval llegó, en Nayarit había 92 mil 068 personas en marginación extrema. En 2016, la cifra se había elevado a 99 mil 351. Es decir: 7 mil 283 personas engrosaron se sumaron a la pobreza extrema. Así mismo hay 20 mil 800 personas más con vulnerabilidad por carencias sociales, 26 mil 800 más que son vulnerables por ingresos, 10 mil 600 más que carecen de seguridad social y 44 mil 500 más que no tienen servicios en la vivienda.