En la industria de la radio y la televisión han notado que desde hace pocas semanas, el siempre echado para adelante Francisco Aguirre, mandamás del Grupo Radio Centro, anda nervioso y dando pasos para atrás en los proyectos de coinversión que tenía en la televisión abierta. Nadie lo dice abiertamente, pero disparando para otro lado, el portal La Política online pegó en seco cuando publicó la semana pasada que el nuevo gobierno de Andrés Manuel López Obrador estaba considerando a José Gutiérrez Vivó como director del IMER. Gutiérrez Vivó radica hace tiempo en San Antonio, Texas, pero desde hace años mantiene una lucha en tribunales contra Aguirre, quien lo despidió hace más de 10 años porque, siempre ha dicho el afamado conductor de radio, defendió a López Obrador durante la campaña presidencial de 2006. Gutiérrez Vivó le ha ganado a Aguirre en tribunales, pero las buenaventuras de don Pancho le han dado los amparos salvadores cada vez que está a punto de perder el caso, que le significaría pagarle a Gutiérrez Vivó 500 millones de pesos. Leyó bien, 500 millones de pesos que, es cierto, ponen nervioso a cualquiera que piense que los va a perder.