Las sorpresas siguen presentándose en Qatar. Con este partido, Marruecos hace historia y se clasifica por primera vez a la fase de cuartos de final. La solidez defensiva surtió efecto ante una España que no pudo desplegar con efectividad su juego ofensivo, además de que las llegadas por ambos bandos en todo el partido fueron muy escasas.
En todo el encuentro, España dominó el juego al tener mayor posesión del balón, pero no encontró esa profundidad ofensiva debido al parado táctico de los marroquíes. Los africanos estaban jugando al contraataque, y sabían que a La Roja le gustaba mantener el control del balón, y mediante un recital de pases, culminar sus jugadas en gol.
En la primera mitad del tiempo regular, los marroquíes hicieron efectivo el contraataque, mediante despliegues veloces por los extremos de la cancha, pero nada que los acercara al gol. En la segunda mitad del partido, España salió dominando el encuentro, pero a cada minuto que transcurría se notaba más la frustración de los españoles, además de la falta de verticalidad ante el baluarte africano.
En el minuto 55, España comenzó con los disparos lejanos que no surtieron efecto porque el arquero marroquí Bounou, defendía su arco de manera excepcional; ese sería el comienzo de quien se convertiría en el héroe de su país en la tanda de penales.
Al minuto 70 se veía el dedsgaste de ambas selecciones y sin claridad de gol, puesto que hasta ese momento, solo habían transcurrido cinco ocasiones de gol por parte de ambos países. Un encuentro bastante trabado en el que ninguno cedía. Las intenciones de Marruecos se centraron en extender el partido al punto de los penales, debido a que ahí tendrían un atisbo de luz para lograr la gran hazaña.
Terminado el tiempo regular y el tiempo extra llegaron los tan ansiados penales. España tenía que vencer a sus fantasmas del pasado, pues en el mundial anterior habían sido eliminados por Rusia en los penaltis. Los marroquíes Sabiri, Ziyech y Hakimi anotaron sus penales. Hay que destacar la frialdad con la que cobró la figura de Marruecos, Hakimi, al plantarse con maestría en el último tiro y definir con sutileza a lo Panenka. Un gol que ponía a soñar a una nación.
La desconcentración de España les costó la eliminación, pues desde la notable baja de juego que tuvo en la fase de grupos se avizoraba la derrota, como sucedió en ocasiones anteriores. España siempre será un firme candidato en los mundiales, principalmente por su cantera de jugadores, así como una de las mejores ligas de futbol del mundo. Sin embargo, uno de los principales problemas que salieron a
flote en este partido fue al momento de crear jugadas de gol.
Marruecos aprovechó su parado táctico a la defensa y supo alargar bien el juego ante un rival temible, pero maniatado. Hoy, Marruecos ha logrado la hazaña, ha hecho historia.
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