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› El servicio médico de la burocracia reporta el déficit más alto de su historia; su gasto equivale a más de 31% de lo que se recauda en IVA en todo el país. El nuevo gobierno deberá añadir cuatro mil 80 mdp anuales, por la cancelación de los seguros de gastos médicos mayores a los funcionarios de primer nivel
El gobierno de Andrés Manuel López Obrador se topará financieramente con una sorpresa. El primer gran socavón de la administración pública federal lo encontrará en el ISSSTE. Es tan grande que equivale a 31% del Impuesto al Valor Agregado (IVA) recaudado en todo el sexenio del presidente Enrique Peña Nieto. Por ahora, el gasto del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) está desbordado. Su déficit se ubica en máximos históricos. Los datos oficiales más recientes, de enero a septiembre de este año, muestran que por cada peso que recaudó, gastó 3.9 pesos; es decir, por cada peso que gastó el ISSSTE en este año, sus ingresos sólo cubrieron 26 centavos. Hasta septiembre pasado, esta institución encargada de la salud y las pensiones de los burócratas reportó ingresos que sumaron 59 mil 322 millones de pesos. En ese periodo, las cajas recaudadoras del ISSSTE vieron una reducción real (descontando la inflación) de 1.8%, que se traduce en mil 100 millones de pesos menos. Sin embargo, el gasto aumentó en términos reales 4.8% o 10 mil 500 millones de pesos, para sumar 229 mil 500 millones de pesos. Esto significa que los administradores del ISSSTE están gastando a un ritmo de 850 millones de pesos diarios. Es decir, gastan cada día lo que 26 mil 300 obreros ganan en un año con un salario mínimo o su equivalente a casi dos veces lo que se recauda por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que se impuso cuando el llamado gasolinazo. Y es inevitable pagar. En la Ley del ISSSTE, publicada en el sexenio de Felipe Calderón y modificada en el sexenio de Enrique Peña Nieto, establece en su artículo 231 que están garantizados los recursos para cubrir el déficit de operación, y el gobierno federal, estatal y municipal deberán solventarlo. De no hacerlo, se paralizaría la estructura de salud de la burocracia.
POR CADA PESO QUE RECAUDÓ EL ISSSTE, GASTÓ 3.9; ES DECIR, POR CADA PESO QUE EROGA EL INSTITUTO EN ESTE AÑO, SUS INGRESOS SÓLO CUBRIERON 26 CENTAVOS.
Saldo negativo
Con ese nivel de ingreso y gasto, las cuentas negativas para el gobierno o llamado déficit suma 170 mil 179 millones de pesos. Cifra que también alcanza un máximo histórico. Para tener una idea de su dimensión, este agujero equivale a 54 veces lo que destinan el gobierno federal a los programas de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) o 12 veces al destinado a la mayor casa de estudios de América Latina, la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) en 2018. Estos 170 mil millones de pesos equivalen al 60% del gasto programable destinado a Educación Pública para este año fiscal. Este hoyo financiero se tiene que pagar y por ello el gobierno tiene que ser mesurado en el gasto o bien, tiene que colocar títulos de deuda. Sin embargo, con la cancelación del proyecto del aeropuerto las tasas de interés subieron a niveles máximos de una década. Así que, financiar al ISSSTE tendrá un mayor peso para todos los contribuyentes. Este déficit del instituto distrae recursos que pagan todos los mexicanos a través de los impuestos, no sólo los derechohabientes. Este agujero está obligando al equipo de Hacienda a considerar ajustes en el diseño del presupuesto para 2019 que en este momento elaboran y deben entregar a más tardar en un mes al Congreso.
EL DÉFICIT POR 170 MIL MILLONES DE PESOS DEL ISSSTE EQUIVALE A 54 VECES LO QUE DESTINA EL GOBIERNO FEDERAL A LOS PROGRAMAS DE CIENCIA, TECNOLOGÍA E INNOVACIÓN DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA O 12 VECES EL CANALIZADO A LA UNAM.
Ahorran centavos y gastan pesos
Andrés Manuel López Obrador se comprometió a encabezar un gobierno austero y una de estas medidas será el eliminar el seguro de gastos médicos mayores al que tienen hasta ahora derecho la alta burocracia, legisladores y miembros del Poder Judicial. Sin embargo, la cancelación de éstos hará más ancho el bache financiero del ISSSTE en al menos cuatro mil 80 millones de pesos.
›Los expertos en el tema, explican que eliminar las pólizas de SGMM, en una primera revisión sí generará un ahorro de alrededor de 2 mil 700 millones de pesos para el primer año de gobierno de AMLO. Sin embargo, trae un costo asociado por el menor ingreso del empleado de gobierno, deja de asistir a los hospitales privados y se recurre al ISSSTE principalmente por enfermedades de alto impacto, y será la institución pública la que proporcione los medicamentos y todos los gastos relacionados a la misma, considera Mario di Costanzo, presidente de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
Independientemente del costo, con el seguro los hospitales privados surtían desde un antigripal de 20 pesos o medicamentos para atender enfermedades de alto impacto como la hepatitis C, cáncer o la hipertensión con precios fuera del alcance de muchas familias mexicanas promedio. Así, para la hepatitis, por ejemplo, hay medicamento que se vende en más de 246 mil pesos o para tratar el cáncer hay algunos que alcanzan los 200 mil pesos y en el caso de la hipertensión se ofrece en 52 mil pesos. Para la especialista del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), Judith Senyacen Méndez, el mayor gasto de todas las áreas del ISSSTE es el relacionado con la salud, principalmente por las enfermedades de alto impacto. Según el documento Impacto para el ISSSTE por la desaparición del seguro de gastos médicos mayores para servidores públicos, Implicaciones de la medida de Austeridad, Di Costanzo sostiene que , por cada peso que ahorre el gobierno federal por eliminar los seguros de gastos médicos mayores, tendrá que desembolsar adicionalmente 1.51 pesos para solventar la mayor demanda de servicios de las principales 11 enfermedades de los burócratas que se quedarán sin la prestación de los seguros.
Por un lado se van ahorrar 2 mil 700 millones de pesos, pero por el otro tendrán un impacto de 4 mil 80 millones. Se tiene que reasignar recursos, de alguna parte tienen que salir ese dinero para pagarlo. A alguien (alguna dependencia federal) se lo van tener que quitar”, dice Di Costanzo.
Con esto se abre un nuevo hueco al instituto, detalla Di Costanzo. Con el sobrecosto que tendrá para el ISSSTE la eliminación de los seguros se podrían construir y poner en marcha, por ejemplo, seis nosocomios como ese de la Secretaría de Salud en Mérida. Se podrían multiplicar 19 veces el “programa de estancias infantiles para apoyar a madres trabajadoras” de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), multiplicar 58 veces el Fondo Nacional Emprendedor (en el rubro desarrollo de los jóvenes) o incrementar casi 40% el programa de Escuelas de Tiempo Completo a nivel primaria, según los datos del Presupuesto de Egresos de la Federación 2018. Di Costanzo comentó que la póliza del seguro de gastos médicos mayores tiene un costo promedio de mil 350 pesos por trabajador y la alternativa para no incurrir en gastos innecesarios, es que el gobierno federal mantenga la compra colectiva de la póliza, pero trasladando el precio de la misma al servidor público. ACTUALMENTE, EL ISSSTE TIENE POCO MÁSDE CUATRO MILLONES DE DERECHOHABIENTES; 72 DE CADA 100 SON EMPLEADOS EN ACTIVOY EL RESTO SON PENSIONADOS. SI SE CONSIDERA A LOS FAMILIARES DE LOS EMPLEADOS, LA CIFRA DE AFILIADOS SE ELEVA A 13.3 MILLONES.
Sin capacidad instalada
A unos meses de que AMLO dio a conocer los Lineamientos de Combate a la Corrupción y Aplicación de una Política de Austeridad Republicana, donde se contempla el despido del 70% del personal de confianza en la administración pública federal y el recorte de salarios, significa que habrá menos burócratas, con menores ingresos y sin póliza de seguros de gastos médicos mayores. De los funcionarios de confianza que queden, tendrán remuneraciones por debajo de las recibidas en la administración de Enrique Peña Nieto. Por ejemplo, quién gana más de un millón de pesos anuales, se reducirá 50 por ciento. Es decir, un burócrata que cobra 83 mil 500 pesos, en la primera quincena de diciembre tendrá un depósito total de 41 mil 750 pesos. Menos dinero y más trabajo porque las reglas contemplan una jornada laboral de seis días de “cuando menos 8 horas diarias”, según los 50 Lineamientos de Combate a la Corrupción y Aplicación de una Política de Austeridad Republicana. Ese menor, ingreso provocaría un éxodo en grandes cantidades de servicios médicos de los funcionarios públicos a los servicios del ISSSTE y el recorte de servidores públicos menos aportaciones. Sin embargo, el instituto no tendría la capacidad para atender esa potencial demanda, por lo que a corto plazo deberá crecer en su infraestructura.
Habrá quienes recurrirán al ISSSTE para suplir el servicio privado del seguro de gastos médicos mayores, pero en el corto plazo la capacidad para atenderlos en el ISSSTE no va a aumentar en la misma proporción”, dice el catedrático e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), Raúl Feliz.
En 2017 el instituto reportó 4.01 millones de derechohabientes, de los cuales 72 de cada 100 eran empleados en activo y el resto pensionados, cifra que al considerar a sus familiares se eleva a 13.3 millones. El año pasado, se reportaron 23.7 millones de consultas totales, alrededor de dos mil 700 consultas en promedio por día. El año pasado el instituto reportó 23 mil 200 médicos para una población de 13.3 millones de derechohabientes. Cifras que significan 1.75 médicos por cada mil derechohabientes. Este número está por debajo del 2.23 médicos que reporta la Organización Mundial de la Salud (OMS) para México en sus datos más reciente de 2015. En el plano internacional, los países con mayor número de galenos son Austria con 5.2 médicos por cada mil habitantes, Noruega (4.4), seguido de Lituania (4.49), Alemania (4.2), Suiza (4.2) y Rusia (4). Por eso, el presidente del Comité Ejecutivo del Sindicato Nacional de Trabajadores del ISSSTE (SNTISSSTE), Luis Miguel Victoria Ranfla, advirtió: “Requerimos por lo menos 48 mil médicos más, solamente en el ISSSTE”. De los ingresos generados por el instituto, las cuotas de los empleados federales representan menos de una décima parte del total. Incluso, considerando otros ingresos por servicios, sólo aportan 15 centavos de cada peso presupuestado para 2017. Ante una eventual mayor demanda de servicios de salud por parte de los funcionarios federales, Victoria Ranfla sostiene que se pretende capitalizar las carencias del instituto con la sensibilización de senadores y diputados que vayan a consulta médica. “El presupuesto en materia de salud debe de ser prioritario y en el Congreso deberán de darle importancia al tema de salud. Requerimos apoyo para crecer en infraestructura y renovar equipos que ya dieron lo que tenía que dar”, comentó el líder sindical. La estimación del líder sindical llevaría al ISSSTE a nivel similar al de Austria para operar el instituto con 68 mil 300 galenos, 45 mil más respecto a los registrados hasta 2017. Ahora, quizá un número más conservador, considerando el promedio de los 20 países con mayor número de médicos por habitante, el instituto necesitaría 28 mil 800 médicos más para llegar a 52 mil profesionales de la medicina. El mismo caso, explicó el líder sindical, es para las enfermeras. Comentó que actualmente laboran 26 mil enfermeras en total, de las cuales mil están bajo el régimen de confianza, por que lo que son susceptibles de despido y “bajo cualquier indicador internacional para atender a 13 millones de personas, requerimos por lo menos 117 mil enfermeras”.
No puede haber trato digno en un hospital si una enfermera en lugar de atender a dos o tres pacientes, atiende a 17 o 20 pacientes”, detalló Victoria Ranfla, al mismo tiempo que puntualizó que el ISSSTE “necesita el apoyo del Poder Legislativo para poner al día al instituto”.
ejecentral buscó la opinión del actual director general del ISSSTE, Florentino Castro López, y con el equipo de prensa de López Obrador se solicitó una entrevista con el futuro titular de la dependencia, Antonio Ramírez, quien fue el encargado de las finanzas del instituto a inicios del sexenio de Enrique Peña Nieto. En la primera nunca respondieron y en la segunda, el equipo de López Obrador dijeron desconocer la agenda de Ramírez.
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