La exsecretaria de la Función Pública, Irma Eréndira Sandoval, anda queriendo que el presidente Andrés Manuel López Obrador la perdone y le vuelva a dar acceso, a ella y a su esposo John Ackerman.
Pero dicen los muy bien enterados que don Andrés no quiere saber nada de ella, nada de nada. Aseguran que no le ha dado cita y cuando se presentó en Palacio Nacional para intentar verlo, ni siquiera la dejaron entrar.