Por décadas, la clave de la alimentación ha permanecido en el campo, pero un reciente descubrimiento podría cambiar esta dinámica. Investigadores de la Universidad de Lancaster en Reino Unido encontraron que los cultivos que incluyen pepinos, papas y lechuga pueden tener rendimientos hasta cuatro veces más altos cuando se cultivan en áreas urbanas en lugar de rurales, lo que abre la puerta a nuevas posibilidades para satisfacer la demanda de alimentos en las grandes ciudades.
Para llegar a esta conclusión, el equipo analizó 200 estudios previos, que cubren 53 países diferentes y más de dos mil puntos de datos,los cuales comparaban los “espacios grises” (carreteras y tejados) y los “espacios verdes” (parques, jardines y parcelas).
Y si bien no quedó claro que tipo de espacio es el más idóneo en términos generales, por tipo de cultivo si hubo preferencias, ya que mientras las verduras de hojas verdes y tomates se adaptan mejor a los ambientes hidropónicos, otros como las lechugas, la col rizada y el brócoli prosperaron más en cultivos verticales.
“A pesar de su creciente popularidad, todavía hay mucho que no sabemos sobre la agricultura urbana, como si los rendimientos son similares a los de la agricultura convencional, o incluso qué cultivos se cultivan comúnmente”, explicó el científico ambiental Florian Payen, de la Universidad de Lancaster en Reino Unido a Science Alert.
“Hubo pocas diferencias entre los rendimientos generales en los espacios interiores y los espacios verdes al aire libre, pero hubo diferencias claras en la idoneidad de los tipos de cultivos para diferentes espacios grises”, puntualizó.
Pese a este descubrimiento, aún se debe analizar el costo monetario que implicaría el cultivo de alimentos en las ciudades, por lo que el equipo de expertos ahora analiza nuevas técnicas de producción urbana y su inversión.
SIGUE LEYENDO: