Hugo López-Gatell afirmó que los menores que se vacunan contra el nuevo coronavirus a través de un amparo le están quitando la oportunidad a personas con mayor riesgo por su edad, único factor que la Secretaría de Salud ha tomado en cuenta para la distribución de estas dosis, a pesar de que un primer borrador se incluían otros ejes de priorización como las enfermedades crónicas.
Durante los primeros meses de la pandemia, e incluso en el momento más crítico, el zar de la pandemia insistió que la alta letalidad del coronavirus en México estaba íntimamente relacionado con la prevalencia de comorbilidades entre la población; sin embargo, una vez que las vacunas comenzaron a llegar al país, nada se hizo para atender a estos pacientes de manera prioritaria.
›Esta situación se agrava entre los pacientes crónicos que son menores de edad, ya que ni siquiera han sido considerados para recibir alguna vacuna contra Covid-19 en los próximos meses, por lo que han recurrido a acciones legales para garantizar su derecho a la salud, algo que el subsecretario López-Gatell ha calificado de “egoísta y que atenta contra los principios de la sanidad colectiva”.
Pero las declaraciones de López-Gatell sobre las “oportunidades perdidas” contrastan con los esfuerzos de vacunación en México, en donde más de 16 millones de dosis permanecen sin ser utilizadas, mientras el ritmo de inmunización desciende cada día sin considerar a personas que por condiciones médicas deberían recibir esta protección sin importar su edad.
Juan Sierra, infectólogo del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, señaló que la lógica del subsecretario es equivocada porque en todo caso “por cada vacuna que se aplica a una persona de 25 años sana se quita la oportunidad a un menor con comorbilidades que tiene mayor riesgo, por lo que es necesario dejar de aplicar solo el criterio de edad para priorizar estas dosis”.