La fuerte lluvia que se registró el pasado lunes en Tula, Hidalgo, dejó severos encharcamientos en el Hospital General y el tianguis, el cual acababa de ser reabierto tras las inundaciones del 6 y 7 de septiembre.
Aunque esta vez no hubo inundaciones, las lluvias sí causaron fuertes encharcamientos en calles, avenidos y en establecimientos mercantiles.
En el Hospital General, el mismo que se inundó y causó la muerte de 17 personas, los primeros días de este mes, el agua nuevamente ingresó a los consultorios y a la sala de espera, por lo que el personal médico y elementos de protección civil tuvieron que salir a limpiar las coladeras y desalojar el agua.
Además, fue necesario colocar costaleras para evitar mayores daños en el nosocomio.
A unos días de reinstalado el tianguis en las calles de la ciudad, el agua llegó hasta la zona de los puestos, por lo que los comerciantes tuvieron que recoger y poner en resguardo su mercancía.
Los trabajadores y asistentes a dicho tianguis lamentaron que las coladeras se encuentren tapadas, por lo que demandaron atención inmediata de las autoridades.
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