Llamada entre El Chapo y las FARC, nueva prueba en juicio

2 de Diciembre de 2024

Llamada entre El Chapo y las FARC, nueva prueba en juicio

FOTO: ESPECIAL

De acuerdo con la grabación las organizaciones pactaron un envío por 6 toneladas

Este jueves en la Corte de Brooklyn, Nueva York, se escuchó por primera vez la voz de Joaquín Guzman Loera en una grabación donde presuntamente se le escucha negociando un cargamento de cocaína con las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El audio de la llamada telefónica, reproducida como parte del juicio contra Guzmán en la Corte de Brooklyn, es la primera vez que el jurado escucha directamente al acusado realizar una negociación sobre drogas. La llamada sucedió en mayo de 2010. Guzmán y el proveedor no identificado de cocaína de las FARC discuten un posible envío de seis toneladas de cocaína desde la frontera suroeste de Colombia hacia bodegas del acusado en la ciudad de Guayaquil, Ecuador, desde donde serían despachadas a México. En la grabación la llamada es iniciada por el sobrino de Guzmán Loera, Tomás, quien está en Colombia a fin de concretar la negociación, que implica el pago en efectivo de dos toneladas de cocaína así como dejar propiedades en garantía por cuatro toneladas adicionales. De acuerdo con el testigo Jorge Milton Cifuentes Villa, traficante colombiano de drogas, el envío de las cuatro toneladas de drogas a crédito nunca se realizó. Él lo supo porque una propiedad suya en la ciudad de Cali es la que se quedaría como garantía. “Aquí hay seriedad. Y me da gusto que sin conocerlo a usted nos de esta seriedad”, afirmó Guzmán en la llamada, con un marcado acento sinaloense. Guzmán, sin embargo, se quejó de que en el último envío de cocaína de parte de proveedores asociados con las FARC la calidad no era óptima, por lo que propone mandar un “técnico” que certifique la calidad de la cocaína antes de que sea enviada a Guayaquil.

Necesito que me haga un favor y que un muchacho cheque las cosas, porque hay cosas que han llegado bajas”, declaró Guzmán. Añadió: “se trata de que las cosas estén buenas”.

El negociante de las FARC aceptó que una persona de Guzmán viaje a revisar la calidad, aunque su preocupación primordial es obtener un 50 por ciento de adelanto de las dos toneladas de cocaína que serán pagadas en efectivo. El hombre de las FARC señaló que si hay cocaína “que salga mala”, Guzmán no tendrá que pagarla. “Te vamos a comprar dos, a cómo me las vas a dejar”, preguntó Guzmán. Luego se inició un regateo, con el hombre de las FARC diciendo que el precio sería dos mil 100 dólares por kilo y Guzmán insistiendo en dos mil dólares. Al finalizar de la negociación, el hombre de las FARC transfirió el teléfono a Tomás, quien confirmó a Guzmán que el precio sería dos mil 100, incluyendo el “flete” desde Colombia hasta Guayaquil. La llamada concuerda con el testimonio de Cifuentes quien había asegurado ante el jurado que entre 2007 y 2008, él comenzó a enviar la cocaína a Guzmán desde Ecuador. Desde Ecuador, Cifuentes adquiría la cocaína principalmente del traficante colombiano Gilberto García, alias “Serpa”, “Pastrana” o “Político”. García vendía la coca en el departamento de Putumayo, en una zona controlada por las FARC. (Con información de Notimex) NR