En un acto en la Casa Blanca, el presidente estadounidense, Barack Obama, subrayó entre lágrimas que el país ha vivido “demasiados tiroteos” masivos en los últimos años y que eso no ocurre en el resto de países desarrollados.
El mandatario lloró al recordar el asesinato de 20 niños en un ataque armado perpetrado por un adolescente en la escuela primaria Sandy Hook, en Newtown, Connecticut.
“Cada vez que pienso en esos niños, me da rabia”, dijo el presidente.