Contrario a la reforma electoral de Morena, el PRI planteó fortalecer al Instituto Nacional Electoral (INE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), así como la elección de consejeros y magistrados.
“Estamos en contra de cualquier intento de destrucción del INE y del Tribunal Electoral”, enfatizó Rubén Moreira Valdez, coordinador de la fracción parlamentaria del PRI en la Cámara de Diputados.
La propuesta de contrarreforma electoral presentada por el partido tricolor sugiere que el INE asuma la facultad de organizar la totalidad de los comicios del país, por lo que se eliminaría los órganos locales, además establecer una fórmula de cálculo para determinar el presupuesto otorgado a los dos órganos electorales, sin intervención de la Cámara de Diputados.
Ante la “creciente violencia criminal en los procesos electorales”, también planteó poner candados para evitar la participación del crimen organizado, con la creación del Sistema Nacional de Protección Electoral dentro del Sistema Nacional de Seguridad Pública, cuyo consejo se integre con autoridades fiscales, gobernadores y electorales.
La revisión de antecedentes financieros y penales de los precandidatos, candidatos, familiares y dirigentes de partidos políticos; protocolos de protección; la anulación de candidaturas ligadas al crimen organizado; sanciones máximas a partidos que postulen candidatos ligados al crimen; implementar medidas cautelares para suspender elecciones por injerencia de la delincuencia; el registro de atentados contra aspirantes; y la creación de un observatorio ciudadano de riesgos en materia de seguridad.
Así también el partido tricolor planteó la creación de la Vicepresidencia de la República, que deberá ir en fórmula con el Presidente en el proceso electoral, y se encargará de los asuntos de política interna, y la mayor libertad de expresión durante campañas.
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