Quién lo diría. Bastaron menos de tres años para que el operador político de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, su secretario de Gobernación y aspirante a la candidatura del PRI a la presidencia, Miguel Ángel Osorio Chong, decidiera traicionar a su partido.
Dicen los que saben que don Miguel Ángel está trabajando con funcionarios de la presidencia para conseguir que un alto número de priistas abandonen el partido y se sumen a Fuerza México, el partido de Pedro Haces.
El todavía priista está muy molesto con el líder del PRI, Alejandro Moreno, a quien apoyó por largo tiempo, y se prepara para ajustar cuentas con él.