La tarde de Manlio
El gran ausente fue el gobernador de Veracruz, Javier Duarte

EDICION-3
Los 24 oradores que participaron en la sesión de la Comisión Política pidieron a Beltrones reconsiderar su dimisión. El gran ausente fue el gobernador de Veracruz, Javier Duarte
Por Gabriela Rivera y Juan Carlos Rodríguez
La escalera que conduce al salón “Alfonso Reyes”, donde Manlio Fabio Beltrones presentó su renuncia como dirigente nacional del PRI, tiene escritos en los peraltes los 13 “pasos para ser un líder”. El onceavo dice: “prepárate para una crisis”; el doceavo aconseja: “mantén la calma”, y el último remata con un “vuelve a intentarlo”.
Eran las 6:40 de la tarde del pasado lunes cuando Beltrones arribó a la reunión de la Comisión Política Permanente. El sonorense aplicó el paso 12 y llegó sin prisas, sonrisa discreta, escoltado por su paisana, la gobernadora Claudia Pavlovich, y la secretaria general del partido, Carolina Monroy del Mazo.
Detrás de ellos aparecieron Qurino Ordaz, gobernador electo de Sinaloa −uno de los cinco candidatos priistas que se alzaron con la victoria el pasado 5 de junio−, y Alejandro Moreno Cárdenas, mandatario de Campeche, uno de los seis estados que aún no conocen la alternancia.
Quienes entraron al salón a paso veloz fueron los gobernadores de los estados donde el tricolor perdió en la pasada jornada electoral. Por separado −y nunca junto al líder saliente− acudieron Roberto Borge, de Quintana Roo; César Duarte, de Chihuahua; Carlos Lozano, de Aguascalientes; Egidio Torre Cantú, de Tamaulipas, y Jorge Herrera, de Durango.
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El gran ausente fue Javier Duarte de Ochoa, gobernador de Veracruz, quien encabeza la lista de mandatarios con el mayor nivel de desaprobación a su gestión, de acuerdo con una encuesta de Parametría.
Fue el único de los gobernadores derrotados que no oyó el mensaje de Beltrones, quien afirmó que “estamos obligados, como nunca antes, a escuchar la voz y los reclamos de los ciudadanos que exigen mejores resultados en sus gobiernos y combate a la corrupción e impunidad”.
A las 17:24 horas del lunes, poco antes de que comenzara la reunión de la Comisión Política, el mandatario escribió en su cuenta de Twitter: “Se espera que la tormenta tropical #Danielle impacte en territorio veracruzano entre las 19 y 20 hrs del día de hoy. Nos encontramos ya en ALERTA ROJA”.
El meteoro impidió a Duarte viajar a la Ciudad de México, por lo que no tuvo oportunidad de escuchar a Beltrones cuando, al hacer un análisis de las derrotas en las urnas, sostuvo que “los electores dieron un mensaje a políticos que incurrieron en excesos, que no tuvieron conductas transparentes y que no actuaron de manera responsable”.
Divisiones y traiciones Como reza el escalón número 11 de la escalera priista, Beltrones avizoró una crisis tras los resultados electorales. Y se preparó para encararla. Un diagnóstico interno del PRI, elaborado después del descalabro del 5 de junio pasado, menciona que las divisiones al interior de los comités estatales, traiciones entre los militantes y la competencia de los priistas por la candidatura presidencial influyeron en los resultados.
Fuentes internas del partido señalan que el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, se alió con el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, para apoyar a Antonio Gali e impedir el avance de la candidata tricolor Blanca Alcalá.
En el caso de Veracruz, entidad que tiene el tercer padrón electoral más grande a escala nacional y que genera 5.1% del PIB nacional, el candidato Héctor Yunes no tuvo el apoyo que esperaba; Beltrones prefirió acudir al arranque de campañas en Oaxaca, con Alejandro Murat.
Adicionalmente, las iniciativas del presidente Enrique Peña Nieto sobre los matrimonios entre personas del mismo sexo y la legalización de la marihuana para fines medicinales resonaron entre el electorado. “Fue un error que le costó muy caro”, aseguró un especialista allegado al partido.
Los estatutos del PRI establecen que a la Comisión Política permanente debieron acudir el presidente Peña Nieto, los gobernadores del partido, los coordinadores de las fracciones parlamentarias, los líderes estatales, los dirigentes de los sectores, el presidente de los legisladores locales y el líder de los alcaldes del partido.
Pero César Camacho, coordinador de la bancada del PRI en la Cámara de Diputados, no acudió a la cita. En cambio, sí asistió a la presentación del avance de la obra “Fuentes Históricas de la Constitución de 1917”, que se realizó en el Alcázar del Castillo de Chapultepec, que se llevó a cabo a la misma hora.
La tarde de la despedida de Beltrones fue lluviosa. Varios de los convocados a la reunión llegaron con los pies húmedos. Fueron 24 los oradores en las tres horas que duró el acto realizado a puerta cerrada. Hablaron 15 gobernadores —en funciones y electos—, todos manifestaron su apoyo a Manlio y le pidieron repensar la renuncia.
Los tres sectores (obrero, campesino y organizaciones populares), los líderes de movimiento territorial, de mujeres y jóvenes también le pidieron que no se fuera.
Incluso, Manuel Cota Jiménez, líder de la Confederación Nacional Campesina (CNC), preguntó si en ese momento se podía votar la aceptación o el rechazo de la renuncia de Beltrones, pero le explicaron que todo se hará en el Consejo Político.
Manlio se limitó a escuchar y no hizo ningún comentario. Antes, durante su discurso de dimisión, puso en práctica el paso 13 escrito en la escalera del tricolor y dijo que “mi vocación es la política y seguiré en ella; no obstante, toca hacer una pausa necesaria para continuar después en la búsqueda de los mismos objetivos que, desde hace años, junto a muchos de ustedes, hemos venido platicando para encarar las nuevas circunstancias que México vive”.
El hombre que coordinó a los grupos parlamentarios del PRI en la primera mitad del gobierno de Peña Nieto se refería a las grandes reformas aprobadas en 2013 y 2014. Y alertó: “En el centro de esta discusión se encuentran las reformas estructurales que, en este siglo, revolucionaron a nuestro país y quienes las defendemos frente a los grupos que surgen abiertamente y quieren derrotarlas”.