Para los escépticos que imaginan que el gobierno de Estados Unidos no pone atención en cada pequeño detalle cuando se trata de sus relaciones económico-políticas en el mundo, deben saber que sí lo hacen y de forma contundente.
Resulta que representantes estadounidenses presionaron ya a las empresas mexicanas que tienen operaciones en Rusia para que, a la brevedad, corten sus vínculos comerciales con el país euroasiático, y sin pretextos, porque de manera evidente tendrían consecuencias. Son varias y están definiendo la ruta y costos de la medida.