La Portada | Se destapan las 'corcholatas'

22 de Noviembre de 2024

La Portada | Se destapan las ‘corcholatas’

Morena corcholatas
Morena corcholatas

En esta acelerada pelea, los escenarios para Morena, por ahora, son favorables, aunque el riesgo de una ruptura es posible; pero detrás de esta prisa podría esconderse la intención de eclipsar los otros 20 mil cargos de elección popular en disputa y que es donde estará el verdadero juego político y la gobernabilidad del país

El 6 de junio de 2023 deberá recordarse como el día que inició la carrera por suceder a Andrés Manuel López Obrador de la Presidencia de la República, y que fue él mismo el que dio el banderazo, quien por ahora lleva la batuta y hasta el cronómetro. Aunque quien aceleró todo y obligó al destape de las llamadas corcholatas fue Marcelo Ebrard, al anunciar su renuncia ese martes, pero el pacto fue sellado horas antes, en la cena con el mandatario y los cuatro precandidatos.

Y frente a este histórico adelanto de los tiempos políticos, los analistas no se ponen de acuerdo ante el impacto y los escenarios que a partir de ahora puedan desencadenarse, hay quienes aseguran que todo será muy controlado, otros plantean fracturas y algunos más una gran confrontación. Pero en lo que sí coinciden es en que aunque pudieran ser muchos los aspirantes y de distintos frentes, en realidad es una carrera de dos o tres, y todos del mismo partido: Morena.

Así que dar paso a la sucesión con tanta prisa, simplemente fue lanzar una jugada estratégica y ganadora para Morena. “Se le están dando las cosas, él (López Obrador) inició la carrera inicia con una derrota del PRI-PAN-PRD, y con un rompimiento de la Alianza, de alguna manera ya se aseguró romper a la oposición como bloque único, ya no va a existir bloque único, el bloque único era el que ponía en peligro a Morena, de entrada ya no va a haber un bloque único. Todo le pinta bien”, aseveró Roy Campos, uno de los analistas y encuestadores más reconocidos del país.

Con una oposición desdibujada, muy rezagada en sus tiempos y definiciones, la iniciativa que tomó el próximo excanciller Marcelo Ebrard simplemente metió aún más el acelerador.

“Ya inició este proceso y por eso la renuncia de Marcelo Ebrard, porque, como es de dominio público, él aspira a ser candidato, como la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, como el coordinador de los senadores, Ricardo Monreal, como Adán Augusto López Hernández, secretario de Gobernación, son los que han expresado su interés” recalcó el martes el presidente López Obrador.

El acuerdo entre los aspirantes con el Presidente fue respetar las reglas del partido, porque se aseguró que garantizarán equidad y una contienda limpia. Así que este domingo que sesione el Consejo Nacional de Morena, será la definición clara de los próximos seis meses de contienda.

Para el profesor e investigador Javier Oliva Posada, sí existe un mal cálculo y una precipitación por parte de Morena, “El hecho que un partido gane una gubernatura (como el estado de México) no quiere decir que gane la Presidencia, hay un error de apreciación serio del Presidente y sus operadores políticos”.

Y justo esta adelantada disputa por la candidatura de Morena, advierten, podría buscar eclipsar el proceso de elección de los otros 20 mil cargos estarán al mismo tiempo en disputa en 2024, entre senadores, diputados federales y locales, gobernadores, alcaldes y autoridades municipales, cargos en los que reside el motor de la gobernabilidad del país, y las negociaciones políticas.

Oliva Posada sostiene “no hay que enfocarse tanto a la Presidencia, hay que enfocarnos en los 500 lugares en el Congreso”, y en el resto de los candidatos de elección popular. Es en ese espacio microelectoral donde “Morena puede perder con Morena”, advirtió.

Sin embargo, por el momento “el Presidente tiene el control total de la sucesión presidencial y no va a dejar que se le vaya. Es por eso que él está estableciendo los tiempos y las reglas, así como habló de las corcholatas hace dos años y enumero una lista, ahora ya la redujo a cuatro y básicamente a tres”, señaló Juan Ricardo Pérez-Escamilla, presidente y director general de la consultora Central de Inteligencia Política.

las corcholatas- Sheinbaum

Carrera de dos o tres, pero ¿quiénes?

Aunque la mayoría de los pronósticos sobre quiénes serán los candidatos de la oposición a la presidencia de la República son reservados, y después de la derrota que sumó la alianza del PRI, PAN y PRD en el estado de México, la definición de la sucesión presidencial parece estar sólo en la cancha de Morena.

Sin embargo, a pesar de que hay pocas dudas de que el próximo inquilino o inquilina en Palacio Nacional será un relevo del partido en el poder, las interrogantes en torno a quiénes serán esos perfiles se mantendrán a la expectativa, pues la anticipada renuncia de Marcelo Ebrard es visto por diversos analistas como un triunfo efímero en su popularidad.

Considerando que la posición que la Jefatura de Gobierno le otorga a Claudia Sheinbaum una mayor ventaja en cuanto a exposición mediática y el manejo de recursos para hacer campaña Pérez-Escamilla señaló que, con base en las encuestas, es ella y Marcelo Ebrard en quienes se sintetiza realmente la contienda por la candidatura de Morena.

“Son los que van más arriba en las encuestas y la ventaja que traen ellos respecto del tercero y cuarto lugar, pues el margen ya es muy grande. Pienso que no hay manera de justificar que un tercero o un cuarto lugar podría quedar en la candidatura”, refirió el también cofundador de Oraculus, sitio especializado en política y elecciones.

Sin embargo, para José Antonio Crespo Mendoza, historiador y analista político, la contienda se centra en la jefa de gobierno de la CDMX y en el aún secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien por encima de Marcelo Ebrard e incluso la propia Sheinbaum, es el perfil que podría garantizarle al presidente López Obrador una continuidad a su proyecto de gobierno.

“Adán es quien tiene una fuerza personal, que no tiene Claudia, que le permita resistir las presiones que vengan de Estados Unidos, de empresarios, de grupos y sectores para cambiar o modificar. Si lo que quiere López Obrador es mantener su proyecto en los términos en los que los ha planteado, el mejor sería Adán. El más seguro sería él, desde mi punto de vista, porque no cedería a presiones externas aún cuando López Obrador ya no esté presente o su influencia baje”, sostuvo.

Para el articulista e investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE), la apuesta que hizo Marcelo Ebrard de ser el primero en dejar su cargo y buscar fijar sus condiciones para el proceso de selección, podría tratarse de un as bajo la manga para el exjefe de gobierno capitalino, en caso de que sus demandas no sean atendidas como las prevé y si el resultado no le favorece.

“Creo que él (Marcelo Ebrard) pueda calcular que le conviene más salirse de Morena, aunque no necesariamente pueda ganar la presidencia (con otro partido), que quedarse en Morena sin ser el candidato. De todas maneras, sabiendo que él no va a tener la presidencia está muy enemistado con Claudia”, refirió José Antonio Crespo.

En ese sentido subrayó que anticipando la baja probabilidad de que Marcelo sea el candidato, pues “no es el favorito, y López Obrador no confía en él porque puede ser más moderado”, Crespo Mendoza señaló que el casi extitular de la SRE calcula poder quedarse como “el jefe o segundo y eventualmente primero de Movimiento Ciudadano y puedo seguir jugando a la política”.

No obstante, apuntó que la reunión a la que convocó el presidente López Obrador al día siguiente del triunfo electoral de Delfina Gómez en el estado de México, demuestra el deseo del mandatario de que no haya ruptura, de “que no se vaya Marcelo, sobre todo, que es el que se puede ir”.

las corcholatas Ebrard

El rompimiento

A pesar de la fuerza del presidente López Obrador y los pactos planteados, “no veo por qué no hablar de una ruptura, es un escenario real, históricamente lo ha sido”, advierte el especialista Oliva Posada.

“Se abrió un compás tan amplio cronológico incentivas grillas internas, puede ser contraproducente (para Morena)”, detalló.

Recientemente, explicó en entrevista, ha estudiado a detalle los procesos sucesorios que ha vivido México, por ejemplo en la sucesión presidencial de Miguel Alemán a Ruiz Cortines, o de Adolfo Ruiz Cortines a Adolfo López Mateos y a Gustavo Díaz Ordaz, lo que se llaman periodo de presidencialismo clásico, “aún en ese contexto con el PRI, el presidente y estabilidad económica, hubo fracturas en la élite, lo mismo puedes ver de Luis Echeverría para acá y incluyendo las dos sucesiones panistas, ni Felipe Calderón era el candidato de Vicente Fox, ni Josefina Vázquez Mota era la candidata de Calderón; y en el caso de Enrique Peña Nieto fue clarísima la negociación con López Obrador”.

“En términos generales, las sucesiones presidenciales en México se observa una fractura en la élite gobernante, puede ser que López Obrador, como sucedió en el caso de (sin algún parangón ideológico) de Luis Echeverría a José López Portillo o bien de Miguel de la Madrid a Carlos Salinas, que en los dos casos el proyecto era de continuidad; pero en el caso de López Obrador y su sucesión se observa la posibilidad de una ruptura, no obstante la enorme fuerza que tiene el presidente que es incuestionable”, explicó Oliva Posada.

Esto puede ocurrir a pesar de los pactos internos en Morena, se le pregunta

“Los pactos en la política se hacen para romperlos, ¿no?”, responde.

Y añade: “(Manuel Garza González) El Meme Garza decía, para que el PRI pierda, el PRI le tiene que ganar. Es decir, la derrota de Morena podría gestarse desde adentro de Morena, por los rompimientos internos, que es lo mismo que sucedió con la corriente democrática de Cuauhtémoc Cárdenas, por ejemplo, antecedentes sí hay también”.

las corcholatas- Adán

Total control de daños

El manejo político que ha caracterizado al presidente López Obrador de la discusión y la agenda pública es uno de los elementos que más ha favorecido a Morena. Expertos señalan que los costos de asumir la decisión de quién será la persona que lo suceda son menores, respecto a los cambios en su gabinete y las implicaciones de quedarse sin dos de sus principales operadores en el último tramo de su gobierno.

Para Jorge Buendía Laredo, politólogo y encuestador, la anticipación del proceso de selección de candidato le traerá a Morena un efecto equivalente a lo que en Estados Unidos se conoce como el rebote de la convención, con el que “la cobertura mediática alrededor de su proceso de nominación aumenta temporalmente sus preferencias”.

Y Roy Campos, presidente de Consulta-Mitofsky, fue más allá: El arranque de la carrera oficialista la marcó el Presidente, pone las reglas, pone los tiempos, pone los jugadores, todo opera a su favor, a favor de Morena. Les da oportunidad a ellos que ya se promuevan, tienen muchas figuras, validará su candidatura, la validará porque así pasará con el ganador. Puso reglas donde todos ganen, donde no haya perdedores, así que pronto, en agosto, habrá candidatos de Morena que le va a sacar muchísima ventaja a los demás”.

La ventaja del partido en el poder radicará en que su candidato o candidata, subraya, es que estará muy legitimado, porque habrá una verdadera competencia en la que deberán recorrer el país y hacer realmente campaña.

“No va a haber un rompimiento interno. No va a existir. Les advirtió (el Presidente), les ofreció, les dijo que todos ganaban, les dijo que jueguen en la contienda y el que gane va a salir muy legitimado. La contienda va a ser real, no va a haber rompimiento y el ganador va a ser legitimado, porque la contienda va a ser real entonces lo vamos a ver en campaña, con propuestas y ataques, pero va a ser legitimado y no veo rompimiento”, anticipó el especialista.

José Antonio Crespo consideró que al ir en decadencia el gobierno de López Obrador, ante la atención que acaparan los candidatos y el proceso de 2024, pues la rotación en Gobernación como en la Cancillería le implica el “sacrificar a algunos de sus secretarios” es menor en comparación con las posibilidades de garantizar el triunfo.

“Es simplemente para apresurar el proceso de la candidatura en esa medida incrementar las posibilidades de que ganen, y es lo que le interesa, que gane en 2024. El sacrificio y el costo es menor en comparación con lo que él busca, que es que se mantenga su proyecto”, subrayó.

Para Crespo Mendoza, precisamente Morena y el presidente López Obrador son quienes más se han beneficiado y han sacado ventaja de posicionar la campaña de manera anticipada, pues ello no sólo ha centrado la atención en sus candidatos también “se traduce en una mayor intención de voto”.

las corcholatas - Monreal

¿Cómo se financiarán las campañas anticipadas?

Un aspecto que destaca el analista Luis Estrada Straffon, es la manera en la que tanto los aspirantes de Morena como los partidos de oposición buscan dominar la conversación a unos meses de que formalmente dé inicio el proceso electoral, pero fuera de sus posiciones y las herramientas que hasta ahora tienen para justificar sus actividades proselitistas.

“Ya los conciertos del Zócalo no los podrá anunciar Claudia Sheinbaum; Adán Augusto López que hace giras por todo el país operando para el presidente, qué pretexto tendrá, ¿cómo lo recibirán en otros estados y quién pagara por eso cuando se salga de Gobernación? ¿Cuántas giras, con qué dinero y con qué razón va a estar Marcelo Ebrard recorriendo el país sino es por las actividades de canciller? Todos estos son actos anticipados”, cuestionó el director general de SPIN-Taller de Comunicación Política (SPIN-TCP).

Al respecto, el doctor en Ciencia Política señaló que no se trata de un comportamiento único de Morena sino también de la oposición, pues aunque el partido del presidente encabeza el número de denuncias por el uso de recursos públicos para actos anticipados de campaña, advirtió que “sería muy lamentable, aunque esa es la ley, que las candidaturas se bloqueen o se caigan por actos anticipados de cualquier dado”.

Tras el anuncio de Ebrard, apuntó Estrada Straffon, muchas personas están renunciando a la Secretaría de Relaciones Exteriores, “¿de qué van a vivir y con qué dinero van a trabajar? ¿quién está financiando eso? O están los dados cargados para alguien en Morena, o en el PAN o en el PRI; o en realidad está libre para cualquiera. Yo dudo que esto esté parejo, la verdad”.

Luego de que hace unos días la Sala Especializada del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que no hubo actos anticipados de precampaña y campaña en casos que involucraron a aspirantes Morena y al panista Santiago Creel.

Diputados federales de Acción Nacional reiteraron las denuncias por probables actos anticipados de campaña y desvío de recursos públicos por parte de las tres principales “corcholatas” de Morena: Marcelo Ebrard, Claudia Sheinbaum y Adán Augusto López.

¿Y la oposición?

Aunque la mayoría de los especialistas consultados reconocieron el rezago de la oposición rumbo a la elección del 2 de junio del próximo año, algunos apuntaron que, si bien la anticipación morenista en el proceso puede ser un factor en contra, aún no se puede descartar una apuesta viable desde los partidos contrarios a Morena.

Sobre ese escenario, José Antonio Crespo reconoció que sí hay un retraso, aunque señaló que, si la oposición define un procedimiento que priorice una “participación ciudadana directa” y no derivado de un “arreglo copular” para definir precisamente un candidato con un perfil ciudadano, esa podría ser una medida competitiva para todos aquellos que no quieren que Morena siga en el poder.

La oposición “sí está en desventaja desde luego, por muchas razones, pero no diría que está perdida por completo. Todavía tiene una posibilidad por ahí”, puntualizó.

Para Jorge Buendía, director de Buendía & Laredo, el foco mediático que se está yendo para Morena y sus aspirantes es un factor que juega en contra de la oposición, pues al concentrar la cobertura de medios, “no se va a estar hablando en absoluto en los aspirantes de PAN, PRI, PRD y eso va en detrimento del posicionamiento que ellos tienen”.

Además de señalar que se trata de una condición que pudiera prolongarse en los próximos dos meses en lo que definen su candidatura, lo cual dificulta aún más el que se den a conocer o que se posicionen los aspirantes de oposición. “Ciertamente sí van retrasados y con esto van a tener que disputar el espacio mediático con el proceso de Morena”, refirió el doctor en Ciencia Política por la Universidad de Chicago.

Partiendo de la analogía de que si se estuviera corriendo un maratón, que consta de 42 kilómetros, los aspirantes de Morena están empezando en el kilómetro 35 y la posición en el kilómetro cero, Juan Ricardo Pérez-Escamilla advierte sobre los obstáculos que enfrentan los partidos y aspirantes opuestos a Morena y sus aliados.

“Sin importar el paso y la velocidad a la que va la oposición parece muy difícil que alcance y que rebase a Morena. Y es la misma fórmula que ha usado Morena y el presidente básicamente en todos los procesos electorales: adelanta sus corcholatas y le ha dado resultado; mientras la oposición muy desorganizada, desmenguada, desarticulada, con broncas internas y peleándose por quién va a ser”.

Mientras la “movida política” del presidente López Obrador de adelantar el proceso posiciona la candidatura presidencial de Morena; en los casos de Lilly Téllez y Santiago Creel, como los aspirantes más visibles en las encuestas, primero deben superar las trabas que les impone su propio partido.

“Entre ellos mismos parece que el PAN no tiene una clara definición de cómo y por qué se va a elegir al candidato. Escuchamos a Marko Cortés decir que necesitan un millón de firmas, yo no sé en qué planeta viva y qué esté viendo al poner trabas muy grandes a los suyos”.

Una joya en el olvido

Considerando el escenario de ventaja que parece tener Morena en la carrera presidencial, Pérez-Escamilla destacó que ambos bandos, tanto Morena como la oposición, están dejando de lado la relevancia política que implica mantener el poder en la Ciudad de México.

“La Ciudad de México es un gran santuario. No hay mejor lugar para ser oposición que la ciudad de México. Porque entonces puedes subir el tono, amagar, romper, reconciliar. Tienes muchas cartas para jugar, pero sí van a tener que ser muy hábiles, señaló el maestro en Comunicación Política por la Ibero.

A decir del analista a diferencia del destino presidencial, en el que hay más claridad de la continuidad de Morena. En el caso de la CDMX “es otro escenario en donde ahí sí hay muchas más interrogantes respecto a qué va a pasar”.

Y es que tras el descalabro que en 2021 tuvo Morena con la perdida de seis alcaldías, la falta de definición de una candidatura que les garantice retener la capital, podría ser aprovechada por la oposición. Aunque a la fecha no hay claridad al respecto.

Juan Ricardo señala que mientras los números favorece a Omar García Harfuch, titular de la SSC, corrientes internas de Morena se oponen pues el funcionario no pertenece al partido; en su lugar, dijo, quedan tres mujeres.

“Rosa Icela Rodríguez que creo que es la más cercana al presidente, la que goza de todas las confianzas; Clara Brugada que le apuesta a que en Iztapalapa la conoce el 90 %; y la secretaria del Bienestar, Ariadna Montiel. De la oposición los números indican que es Xóchitl Gálvez la que tendría que ser, pero tendrá que ser muy hábil para negociar y que su ventaja sea lo suficientemente amplia para tener candidatura. Entonces pareciera que va a ser una lucha de mujeres en la ciudad de México”.

las corcholatas - Noroña