Mientras el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se empeña en combatir el robo de combustible a Petróleos Mexicanos (Pemex) a través de los poliductos que recorren el país, al interior de la empresa productiva del Estado se está llevando a cabo la peor “ordeña” al presupuesto.
Al tiempo que gobierno morenista se esfuerza por subsidiar a Pemex, para elevar su producción y conseguir la anhelada autosuficiencia energética, puertas adentro de la institución que comanda Octavio Romero Oropeza se reportan simulaciones de obra y compras que producen millonarias sangrías a las finanzas.
ejecentral revisó las 984 investigaciones practicadas a Pemex por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) de 2000 a la fecha y detectó que la empresa creada por Lázaro Cárdenas está llegando a su 85 aniversario con el mayor hueco en sus arcas.
PUEDES LEER: Pemex queda corto en metas de producción y rendimiento
De un acumulado de 16 mil 159 millones 700 mil pesos sin solventar, la mayor cantidad de recursos “extraviados” se generó durante los primeros tres años de la llamada Cuarta Transformación, con ocho mil 541.4 millones de pesos que no pueden acreditarse.
Este número equivale a todo el presupuesto de este año de la Cámara de Diputados y Senadores, juntos, o de nueve dependencias del gobierno federal, incluidas la Oficina de la Presidencia, la Suprema Corte, la secretaría de Economía y seis organismos autónomos (INAI, COFECE, IFT y CNDH, entre otros).
En la administración del presidente Felipe Calderón (2007-2012), la segunda administración con desfalcos más cuantiosos, los faltantes suman seis mil 937.3 millones de pesos.
Así, la institución fundada sólo tres meses después de la Expropiación Petrolera no sólo es una de las 10 empresas más endeudadas del mundo, sino que es uno de los organismos de la administración pública federal con más recursos gastados al margen de la normatividad federal, lo que lo convierte en una acción irregular.
Estafa en altamar
Era sábado 17 de diciembre de 2019. El presidente López Obrador y el entonces gobernador de Tabasco, Adán Augusto López Hernández, visitaban las plataformas Xikin y Xanab, ubicadas en aguas territoriales del Golfo de México, donde Pemex Exploración y Producción realizaba la perforación de seis pozos para la extracción de crudo.
“Los campos que se están explotando, nos están resultando muy productivos”, dijo en aquella ocasión López Obrador. “No es nada más la suerte, es que ahora se está invirtiendo más”, agregó el tabasqueño, quien ese día estuvo acompañado por la secretaria de Energía, Rocío Nahle, y de Romero Oropeza. Un año más tarde, al darse a conocer la revisión a la Cuenta Pública de 2019, la ASF reveló que en esas plataformas se cometió uno de los mayores desfalcos a Pemex.
De acuerdo con la auditoría 2019-6-90T9G-22-0393-2020-393-DE, Pemex Exploración y Producción no aclaró ni proporcionó la documentación justificativa y comprobatoria sobre la inspección y tendido de los ductos que se instalarían en dichas plataformas por un valor de tres mil 339 millones 317 mil 169.31 pesos, uno de los montos más elevados por malas prácticas.
Desde 2000, año en que se creó la Auditoría Superior de la Federación (ASF) y que se comenzó a fiscalizar el gasto público, Petróleos Mexicanos se sometió a 984 auditorías, de las cuales se han desprendido seis mil 807 acciones, entre ellas 16 denuncias penales y 449 pliegos de observación (documentos que notifican el daño a la hacienda pública).
De los tres primeros años del gobierno de López Obrador, el más desaseado fue 2019, cuando Pemex no pudo aclarar el destino de siete mil 486 millones de pesos, todo un récord en el historial presupuestario de la petrolera.
Barril sin fondo
Para Alejandra Macías, directora ejecutiva del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP), la calamidad financiera de 2019 se debe a que en ese año hubo un golpe de timón del gobierno federal, pues de facto se canceló la reforma de 2013 —que permitía la inversión privada en Pemex— y se intentó volver a poner a la petrolera en el centro de vida económica para alcanzar bonanza y autosuficiencia energética.
“El problema es que Pemex siempre ha sido una institución muy opaca, no sabemos en qué se gasta el dinero que se invierte”, dijo Macías, quien señaló que del total de inversión física que se realiza actualmente en México, casi 50 % se va a Pemex y CFE, y de ese 50 % la mayor parte es Pemex.
“Dejamos de lado inversión importante como educación y salud, para inyectarlo a Pemex; no hay buenas escuelas ni buenos hospitales, pero tampoco sabemos si en Pemex se están haciendo bien las cosas”, sostuvo la investigadora.
Dado que Pemex sigue siendo una de las empresas más endeudadas del mundo, y en virtud de que no se han cumplido las metas de producción para lograr la autosuficiencia energética, Macías sugiere que la empresa productiva del Estado debe cambiar su modelo de negocios, pues durante años ha mostrado que no sólo es opaco, sino que también “se ha convertido en un barril sin fondo”.
Fuga en autotanques
En la conferencia mañanera del 27 de diciembre de 2018, el presidente López Obrador anunció el “Plan Conjunto de Atención a Instalaciones Estratégicas de Petróleos Mexicanos”, con el fin de combatir el robo de combustibles y sus efectos adversos en las finanzas públicas.
Como parte de dicho plan, Pemex realizó el cierre temporal de los principales sistemas de distribución (ductos y poliductos), lo que ocasionó desabasto de combustibles, principalmente en la zona centro del país. Para resolver la contingencia, el gobierno ordenó la compra de autotanques, que en ese contexto se consideraba un medio de transporte y distribución más seguro.
Fue en ese marco que se perpetró otra de las “ordeñas” más cuantiosas al presupuesto de la paraestatal. De acuerdo con la auditoría 2019-6-90T9M-19-0408-2020-408-DE, Pemex Corporativo y Pemex Logística no proporcionó documentación comprobatoria para el arrendamiento de 612 autotanques que implicó un gasto por mil 653 millones 85 mil 814 pesos, que hasta la fecha permanecen sin aclarar.
Administrativamente, Pemex se divide en 12 filiales. De ellas, el área donde se reportan las mayores anomalías contables son Exploración y Producción (11 mil 248.9 millones de pesos sin justificar), Transformación Industrial (2 mil 241.9 millones de pesos sin solventar) y Refinación (mil 042.2 millones de pesos sin comprobar).
A continuación se muestra, a detalle, las 984 investigaciones a las que ha sido sometida Pemex desde el año 2000 por parte de la ASF y que muestra en el tamaño de las perforaciones económicas que ha sufrido desde la presidencia de Vicente Fox Quesada hasta la administración morenista. Pero también el mapa del desfalco a toda la administración pública en más de 20 años.