La maldición de Otis
Hasta ahora, con los daños reportados tras el paso de Otis por Guerrero, la gobernadora Evelyn va a sufrir en la reconstrucción de lo que tenga que reconstruir, porque no habrá recursos que le alcancen y el gobierno federal… tampoco tiene
El huracán Otis causó daños estructurales y materiales que todavía no pueden cuantificarse con exactitud, porque aunque ya dejó de ser catastrófico, las secuelas de las afectaciones continúan.
Hasta ahora, con lo que se ha reportado, la gobernadora Evelyn Salgado va a sufrir en la reconstrucción de lo que tenga que reconstruir, porque no habrá recursos que le alcancen y el gobierno federal… tampoco tiene realmente nada que ofrecerle.
El Fondo para Desastres Naturales fue desaparecido por el gobierno federal, que en los primeros nueve meses del sexenio -cuando por cierto, no hubo un solo desastre- se gastó los 300 mil millones de pesos que tenía para casos como el de Otis.
Los recursos que se disponen para emergencias son de 18 mil millones de pesos, que no parecen suficientes para enfrentar la devastación.