Además del peor índice de aprobación que un presidente haya obtenido, Enrique Peña Nieto heredará al candidato del PRI, José Antonio Meade, una percepción muy deteriorada sobre el rumbo que México ha llevado en su sexenio. El sector empresarial nacional realizó una encuesta para medir el pulso que la sociedad tiene sobre la gestión del gobierno federal, la economía y los candidatos abanderados por partidos políticos y de los independientes. Los resultados arrojaron un hándicap negativo para el presidente, y en consecuencia para el candidato de su partido, el PRI. En el ejercicio estadístico, mil 516 personas fueron encuestadas; 76% consideró que el país no va por la ruta correcta. La gestión del presidente en el grupo poblacional consultado mostró que 77% estimó como reprobatoria o definitivamente reprobatoria. La pinza la cerró la percepción sobre la economía nacional, de la que ocho de cada 10 empresarios la calificaron como mala o muy mala. La visión que los encuestados tienen de la economía familiar es dividida. El 44% dijo que su desempeño es bueno, mientras que 43% aseguró que es mala y 11 muy mala. Sólo 1% respondió que la situación de la economía doméstica es excelente en este sexenio. Las cifras difícilmente ayudarían a levantar la candidata de José Antonio Meade, abanderado de la colación PRI-PVEM y Nueva Alianza, Todos por México. El golpe resulta más significativo si se toma en cuenta que los resultados fueron entregado al sector empresarial, el cual, por su perfil, estaría prácticamente en la bolsa del exsecretario de Hacienda.
EL DATO. El presidente es el actor político nacional que detenta 76% de la opinión desfavorable entre los encuestados.
Todos contra todos
La opinión sobre Peña Nieto fue comparada contra los 31 gobernadores y el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, contra los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón, así como con la postura frente a los candidatos presidenciales y sus partidos. El 98% de los encuestados aseguró conocer al presidente, 76% dijo que su opinión sobre él es desfavorable, y más de la mitad la calificó muy desfavorable. En el indicador positivo, sólo 19% dijo que su postura frente al presidente es favorable. La cifra para el presidente sólo rebasa a la de Jaime Rodríguez Calderón, El Bronco, quien sumó 12% de opiniones positivas y por Armando Ríos Piter, que logró siete puntos. La diferencia entre ambos candidatos independientes es que su nivel de conocimiento es menor a la mitad, comparada con la del presidente. Por candidatos, el que mantiene las cifras más equilibradas es el abanderado de la coalición Juntos Haremos Historia, Andrés Manuel López Obrador. El líder de la izquierda social sumó 44% de opiniones positivas y 48% de opiniones negativas. Sin embargo, es el que detenta el indicador positivo más alto entre los candidatos. Como ocurre en las últimas encuestas publicadas, Ricardo Anaya, candidato de la coalición Por México al Frente, obtuvo positivos por 33%, mientras que sus negativos se ubicaron en 45%. Al respecto, el candidato de la alianza Todos por México, José Antonio Meade, recibió 24% de las posiciones favorables y 50% desfavorables. Meade fue rebasado por la percepción positiva atribuida a la precandidata presidencial independiente, la expanista Margarita Zavala, quien recibió 23% de opiniones positivas por 45% negativas. Ante la pregunta directa por la intención de voto. Los encuestados dieron la ventaja a López Obrador, con 31% de las preferencias; seguido por Anaya con 27 enteros y en tercer lugar José Antonio Meade, con 19 puntos porcentuales. El ejercicio también planteó un escenario en el que los encuestados tuvieran que votar por un candidato diferente al de su preferencia. Anaya ocuparía el primer sitio con 25% de las preferencias, López Obrador tendría 16% y Meade 12 por ciento. A la pregunta sobre cual de los candidatos sería “un peligro para México”, 34% atribuyó esa cualidad a Meade, 30% a López Obrador, 15% a Jaime Rodríguez Calderón y 14% a Anaya.