La disminución de población y sus implicaciones a futuro

La crisis poblacional en China es un problema anunciado, pero cada vez se acentúa más, con sus respectivas consecuencias. Al cierre del año pasado, el país registró una disminución poblacional de 2.08 millones de personas, una cifra el doble de lo que se registró en 2022.

Y es que ni el relajamiento de la norma que permitía un hijo por pareja ha funcionado, ya que los jóvenes en edad reproductiva se enfrentan a los altos costos de la vida, lo que les impide formar una familia.

Bajo este panorama, la pandemia de Covid vino a afectar aún más la posibilidad de engendrar hijos, pues aunque se redujo la población, los precios se inflaron, haciendo inaccesibles cosas tan básicas como vivienda y educación.

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Así, el país sigue dependiendo de su fuerza trabajadora, la cual envejece sin que las nuevas generaciones puedan tomar su lugar.

Pero no es sólo China. Según especialistas, aunque la población mundial sigue aumentando, países como Italia, España y Grecia registran tasas de natalidad a la baja, y la tendencia se está expandiendo.

De manera específica, la reducción de mano de obra es una de las principales preocupaciones, ya que generará menor producción y rendimiento. Esto a su vez ocasionará que las personas gasten menos, afectando así a las empresas y al crecimiento económico.

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En este sentido, la Federación Internacional de Sociedades de Fertilidad —organización que representa a más de 65 sociedades nacionales de fertilidad específicas de cada país—, alertó que para finales del siglo XXI, el 93% de los países podrían enfrentar una crisis de subpoblación. Esto significa que a la vez que merman las fuerzas de trabajo y los servicios públicos, se acentuará el envejecimiento, en una especie de círculo vicioso.

Las tendencias económicas actuales también forman parte del problema, del cual no se libran ni las naciones que reportan un alto número de nacimientos, ya que eventualmente, la presión económica llegará a ellas, con sus respectivas consecuencias en la natalidad.

Según expertos, será cerca del 2064 que la población mundial podría alcanzar su punto máximo, con nueve mil 400 millones de personas. A partir de ahí comenzará un declive, en donde se agudizarán las fricciones políticas y sociales.

Otras causas del por qué cada vez menos parejas se reproducen son el actual panorama climático, la contaminación e incluso el aumento de la obesidad.

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BM