El próximo 10 de junio el mundo se detendrá para espectar el duelo más importante del año en el fútbol europeo. Los “citizens” y el Inter realizarán una expedición hacia el Estadio Olímpico Atatürk con la esperanza de regresar a casa con la “orejona” como botín. El partido se transmitirá a las 13:00 hrs, la FIFA espera recibir a más de 70 mil aficionados en el inmueble turco.
Los nerazzurri superaron un gran desafío cuando eliminaron a su acérrimo rival y vecino; ambos partidos fueron bien manejados por la plantilla de Filippo y lo reflejaron con dos porterías imbatidas. La ida fue un juego más “parejo”, no obstante Dzeko y Mjitaryán capitalizaron sus oportunidades de gol para darle una cómoda ventaja a su equipo, ya en la vuelta y jugando como local, proporcionaron un baile a los rossoneri que quedará marcado en los libros de historia.
Aunque no se reflejó en el marcador, el 1 - 0 fue suficiente para demostrar su superioridad y obtener un pase a la gran final.
Por el otro lado, después del empate por la mínima en Madrid, las posibilidades para los merengues y los blues parecían equivalentes, las plantillas se prepararon para la segunda parte de un choque que definiría el éxito o fracaso de su temporada. El Etihad Stadium recibió disfrazado de azul a un Real Madrid fúnebre. Los españoles saltaron al campo con un uniforme negro, como si ellos mismos pronosticaran su eliminación.
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Desde el comienzo, la escuadra de Pep Guardiola no se cansó de mover la pelota a su gusto: de extremo a extremo jugaban con el medio campo merengue como si se trataran de marionetas, y una estructura defensiva disciplinada les ayudaba a recuperar el balón de inmediato.
Bernardo Silva no tardó en marcar un doblete en el primer tiempo, aunque para la segunda parte el vigente campeón parecía despertar, sus intentos de ofensiva nunca sobrepasaban los tres cuartos de cancha. El mismo Militão y La Araña Álvarez fueron los responsables de terminar de enterrar cualquier esperanza madridista y mandarlos de regreso a la península ibérica.
Después de tanta espera así fue como los dos candidatos al título superaron su última prueba antes de llegar a la final de la liga de campeones. Ahora sólo faltan 90 minutos para conocer a un nuevo rey de Europa. Los italianos sumarían su cuarta orejona, mientras tanto los ingleses probarían por primera vez los frutos que han tratado de cosechar desde que llegó el jeque al club. Con la calidad que vimos en todas las eliminatorias, es casi seguro que a las estrellas del fútbol mundial aún les queda clase por derrochar en las tierras de Estambul.
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