Ixhuatlán de Madero es un municipio pobre de apenas 50 mil habitantes que se quedó sin alcalde. Víctor Espinoza Tolentino, edil ixhuateco y aspirante a la diputación, fue asesinado en una operación nunca antes vista que no sólo se sumó a la estadística de homicidios en el país, sino que lo convirtió en uno de los primeros precandidatos muertos, como parte del proceso electoral 2018.
Víctor Espinoza manejaba a Ixhuatlán con habilidad política. Un municipio del norte de Veracruz, colindante con Puebla e Hidalgo, donde 41 mil 800 ciudadanos son pobres y ofrece la oportunidad para crear estructuras sociales que terminan como redes clientelares. En la zona ya se preparaban para las elecciones de 2018 y en Veracruz, además de los cargos federales, se elegirán gobernador y diputados locales, y Espinoza Tolentino sobresalía como virtual candidato del distrito IV estatal por el PAN-PRD.
Víctor iba ser nuestro candidato a diputado❞, sostuvo en el funeral el gobernador panista Miguel Ángel Yunes Linares.
La noche del viernes 24 de noviembre el alcalde de Ixhuatlán fue asesinado por una banda de revendedores de materiales de bodegas gubernamentales, en Banderilla, en la zona conurbada de Xalapa, por una red operada por tres funcionarios de base de la Coordinación de Promoción de Asuntos Cívicos y Culturales de la Secretaria de Gobierno estatal. El presidente municipal había hecho tratos para comprar cuatro mil láminas de zinc a mitad de precio por 400 mil pesos, dinero que le robaron esa noche al político que dejó el priismo de Javier Duarte para apoyar la campaña de Miguel Ángel Yunes Linares.
La contienda en Veracruz abre de manera violenta. En el sur, cuatro días antes, asesinaron a Santana Cruz Bahena, alcalde electo de Hidalgotitlán. Los funerales revivieron lo endeble de la seguridad municipal. Los ocho policías de guardia no pudieron hacer nada frente a los más de 100 pistoleros que llegaron a la casa del político de Nueva Alianza. A más de una semana después, los operativos policiacos no han detenido a ningún indiciado.
Otros dos crímenes
En Guerrero habrá rotación de poderes en el congreso local, federal, alcaldías y senadurías. Por ahora, son dos los políticos asesinados en el estado.
El 15 de noviembre Miguel Solorio Figueroa fue encontrado muerto dentro de su camioneta. El experredista pretendía ser candidato independiente a la alcaldía del municipio de Zihuatanejo, zona turística y de playa en Guerrero. Solorio cobró popularidad apadrinando estudiantes, en apoyos a campesinos y promoviendo la cabalgata anual Ixtapa-Zihuatanejo.
A inicios del año Miguel se unió al movimiento independiente de Armando Ríos Piter y se vio un Miguel Solorio promocionando su asociación “Soy Pueblo” con la que reunía las firmas para la candidatura. Con la muerte de Solorio Figueroa, el Movimiento Jaguar perdió una carta fuerte en Guerrero.
Un escenario similar fue el de Armando Arturo López Solano en Quechultenango, Guerrero. El dirigente del Movimiento Ciudadano llegaba a su domicilio y fue emboscado.
López Solano fue candidato a alcalde por Movimiento Ciudadano en 2008, 2012 y 2015, aunque obtuvo el segundo lugar en la votación. En esta nueva contienda electoral sería nuevamente el candidato.
En 2018 serán elegidos:
•Un presidente de la República.
• 500 diputados federales.
• 128 senadores.
• 8 gobernadores y el jefe de gobierno capitalino.
• 972 diputados estatales.
• 1,796 funcionarios municipales.
Apenas iniciada la contienda electoral y los intereses políticos y económicos, enfrentados contra la violencia, merman cada semana la contienda electoral para el próximo año.