El miércoles 26 de julio se presentó la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares (ENIGH) 2022; esta encuesta elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) captura información sobre los ingresos, gastos y servicios que reportan los hogares. En materia de salud, destaca que la tasa de atención en el sistema público y el gasto de bolsillo siguen empeorando y lejos de los niveles previos a la pandemia. A pesar de que la promesa constante de la actual administración ha sido un sistema de salud universal y medicamentos para todos, la carencia en el acceso a los servicios de salud sigue aumentando y, con ello, la presión en el bolsillo de los hogares.
En 2022, de acuerdo con la ENIGH, la población que se autorreporta como no beneficiaria de alguna institución pública de salud aumentó hasta alcanzar el 42% de la población total, lejos del 15% de la población que, en 2018, se reportaba fuera del sistema público de salud. Además, la población que tuvo una necesidad de salud aumentó en todas las instituciones públicas. Sin embargo, la población que efectivamente recibió atención fue menor a la atendida en 2018. En total, 55 millones de personas necesitaron atención médica y 41 millones la recibieron en el sistema público.
Esta falta de atención se reflejó en el aumento de 30% en el gasto de bolsillo de los hogares. Esto indica que, en promedio, los hogares gastan más en conceptos relacionados a la salud ahora que lo que gastaban con el Seguro Popular. De manera particular, los hogares de menores ingresos duplicaron su gasto en compra de medicamentos sin receta.
La insuficiencia del sistema público de salud ante las necesidades de la población tiene diversas causas que van desde temas de gobernanza, logística, administración, la fragmentación del sistema, entre otros. Sin embargo, una variable que persiste en diferentes administraciones es el presupuesto.
En la misma semana que se publicó la ENIGH 2022, la Secretaría de Hacienda presentó las Estadísticas Oportunas del ejercicio del gasto al segundo trimestre del año en curso. Los recursos ejercidos en la función salud, durante la primera mitad de 2023, suman 305 mil 941 mdp, esto es 18 mil 164 mdp menos que en 2022. Este subejercicio es resultado de que el programa de medicamentos gratuitos ha ejercido el 79.6% de los recursos programados, esto equivale a decir que cuatro de cada diez pesos no ejercidos eran para el programa de medicamentos gratuitos.
En conclusión, la insuficiencia presupuestaria y la ineficiencia en el ejercicio del gasto se refleja en la caída de la población que se reconoce afiliada, disminución de la tasa de atención pública y en el aumento del gasto de bolsillo. El cambio demográfico y la transición epidemiológica aumentarán cada vez más las necesidades de atención. Las acciones de prevención, detección temprana, innovación en tratamientos, entre otros, pueden contribuir a contener las presiones en el gasto en salud. Sin embargo, para que esto ocurra se necesita cambiar la tendencia de hace más de una década y priorizar el gasto en salud sobre otros conceptos como pensiones y energías fósiles, por ejemplo.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP) analizó la ENIGH 2022 y publicó las cifras más relevantes en el micrositio saludenmexico.ciep.mx.
