La Agenda 2030 está orientada a erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todas y todos. Para cumplirla, en 2015 los Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), aprobaron 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) con 169 metas. México, como parte de dicha organización, adquirió el compromiso internacional de impulsar el desarrollo sostenible a través de políticas públicas, las cuales se financian a través del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público vincula el PEF a los ODS a través de los programas presupuestarios, los cuales a la vez pueden vincularse de manera directa o indirecta a las metas de los ODS. Esta alineación se establece si el presupuesto del programa contribuye directamente al avance del objetivo (directa), o bien, si dicho presupuesto puede generar las condiciones que contribuyan al avance del mismo (indirecta). Entre los programas que se vinculan se encuentran los 15 programas prioritarios del gobierno federal, cuyo presupuesto asignado para 2023 es de 776 mil 858 millones de pesos (mdp) equivalente a 9.4% del total del presupuesto público.
Todos los programas prioritarios están vinculados a la Agenda 2030, ya sea de manera directa o indirecta. Estos programas se vinculan a 12 de los 17 ODS establecidos mediante 30 metas. En cuanto a la vinculación directa, el 75.5% del presupuesto de los programas prioritarios está vinculado directamente a los 12 ODS. El 24.5% restante corresponde al presupuesto del Tren Maya y la Refinería Dos Bocas. Estos son los únicos dos programas que no cuentan con vinculaciones directas, a pesar de ser el segundo y tercer programa prioritario con mayor presupuesto.
Por un lado, el Tren Maya sólo se vincula de manera indirecta a la meta 8.9 Elaborar políticas encaminadas a promover un turismo sostenible que cree empleos y promueva la cultura y los productos locales. Además, el indicador asociado a esta meta se encuentra en retroceso y su última actualización fue en 2020. Por otro lado, la Refinería Dos Bocas se vincula indirectamente a las cinco metas del ODS 7 Energía asequible y no contaminante. En estas metas se presentan avances en la asequibilidad de la energía, pero no en cuanto al uso de energías limpias.
Los programas dirigidos al campo, como Sembrando Vida, Fertilizantes y Producción para el Bienestar y Precios de garantía están vinculados a metas del ODS 2 Hambre cero, a las que no se da seguimiento. Esto implica que no existe algún indicador que garantice que dicha vinculación contribuya al avance del ODS.
También es preciso mencionar que los objetivos de algunos programas presupuestarios no coinciden con las metas o indicadores a las que están vinculados. Por ejemplo, la Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores es el programa prioritario con mayor presupuesto; sin embargo, se vincula directamente sólo al ODS 1 Fin de la pobreza por medio de una meta, la cual no es congruente con el objetivo del programa, el cual es mejorar la situación de protección social de la población mayor de 65 años a través de apoyos económicos. En cambio, el indicador asociado a la meta 1.4 se refiere a “La población adulta con derechos de tenencia de tierra que posee documentación reconocida legalmente”.
Aunque todos los programas prioritarios están vinculados a la Agenda 2030, varias de estas vinculaciones no tienen seguimiento, no son congruentes entre objetivos o tienen indicadores desactualizados. Por lo tanto, una mejor revisión de las vinculaciones de los programas presupuestarios con los ODS permitiría conocer el avance efectivo en el desarrollo sostenible. De esta manera será posible analizar correctamente el desempeño de los programas prioritarios hacia el cumplimiento de dichos objetivos.
El Centro de Investigación Económica y Presupuestaria analizó la manera en la que el sistema fiscal contribuye al alcance de los ODS, desde las políticas de gasto, ingresos y la deuda pública. El documento puede consultarse en desarrollosostenible.ciep.mx.
