El sábado pasado se reunió un grupo selecto de la política priista, con motivo de la boda del senador Roberto Albores Gleason, hijo del exgobernador Roberto Albores, expulsado de su partido en 2008, con Karla Esmeralda Méndez Marrufo. La boda, como son todas las de su especie, fue un happening político, porque dicen en Chiapas que fue una señal de que será el próximo gobernador en 2018. Dicen los que saben que la boda sirvió para estrechar lazos políticos, por lo que ninguno de los invitados rechazó la invitación, como los gobernadores de Zacatecas, Alejandro Tello, y de Chiapas, Manuel Velasco Coello. También se le vio de lejos a varios senadores priistas, aunque el más importante era Emilio Gamboa Patrón. El lugar de la boda fue la antigua finca Tetik de Regil, lugar donde se casaron los tres hijos del expresidente Carlos Salinas, quien impidió que los periodistas pudieran indagar qué funcionarios federales, como el secretario de Educación, Aurelio Nuño, estuvieron presentes.