El malestar psicológico, sea por depresión, ansiedad, preocupación, estrés o soledad, previo a la infección por el coronavirus SARS-CoV-2 parece haber predispuesto a algunas personas a padecer secuelas de la Covid-19.
Un estudio hecho por investigadores de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard no sólo encontró la asociación entre el aspecto psicológico y lo que se ha denominado Covid persistente o larga, sino que ubicó que el aumento del riesgo fue independiente del tabaquismo, el asma y otros comportamientos de salud o condiciones de salud física.
Además, los investigadores se sorprendieron, pues el malestar psicológico o angustia “se asoció más fuertemente con el desarrollo de Covid persistente que los factores de riesgo para la salud física como la obesidad, el asma y la hipertensión”, dijo Siwen Wang, quien dirigió el estudio que se publica hoy en la revista especializada JAMA Psychiatry.
La investigación inició en abril de 2020 con la inscripción de más de 54 mil personas, a quienes se les preguntó sobre las diversas manifestaciones que puede tener el malestar psicológico; en el transcurso de un año, más de tres mil participantes contrajeron Covid-19, y los investigadores dieron seguimiento a sus síntomas y a la duración de los mismos.
El análisis reveló que las afecciones psicológicas se asociaron con entre 32 y 46% más riesgo de padecer Covid persistente; además, estas formas de angustia también se asociaron con un riesgo entre 15 y 51% mayor de deterioro de la vida cotidiana debido a las secuelas.
