Kimonos largos, influencia oriental
Nunca una prenda pudo tener tantos usos y tan diferentes.

Los kimonos japoneses se han convertido en una prenda clave de media estación. Esta temporada las tiendas están llenas de esta prenda y el culpable es Paul Poiret, mítico diseñador francés que causó furor en París con sus diseños teatrales y de tendencia orientalista, introdujo a principios del siglo XX en Europa la admiración o la fiebre por esta prenda típica de la cultura japonesa. A partir de él, diseñadores y marcas muy reconocidas como Yves Saint Laurent, John Galliano, Jean Paul Gaultier o Kenzo se rindieron ante una prenda elegante y fluida que inyecta un estilo muy especial a cualquier look. La propuesta se ha convertido en una de las inspiraciones favoritas de la temporada. Modelos como Emily Ratajkowski o actrices como Jessica Alba llevan el kimono en su look casual o de playa. Durante esta primavera-verano tiendas como Zara, Uterqüe, Mango o Bershka, se adueñaron de esta prenda y la ponen en sintonía con otras tendencias tanto en colores, tejidos y motivos decorativos. Puedes combinar el kimono largo con prendas comunes como jeans con un top neutro y sandalias planas o bien con un short y una t-shirt lisa, ideal para un fin de semana de compras o para aquellas mañanas de playa. Esta prenda luce muy bien, tanto en estampados florales, rayas o jaquard como en lisos. También la puedes utilizar en versión chaqueta o con detalles como bordados o cinturones. Si eres más arriesgada puedes combinar en un mismo look dos estampados diferentes. Solo debes tener cuidado y hacerlo de una manera correcta, sin excesos. Podrías probar con una prenda con rayas discretas y un kimono con estampado floral. ¿Te atreverías?
Nunca una prenda pudo tener tantos usos y tan diferentes. Sí, el kimono también lo puedes combinar con un cropped top y unos leggins. La clave es que elijas uno muy llamativo y tenga un toque especial. Otra propuesta es combinar el kimono con un pantalón o falda en la misma tonalidad, incluso con los zapatos. Como parte de arriba, te aconsejamos apostar por una tonalidad neutra como el negro para que el resultado no sea tan drástico y puedas equilibrar un poco el look.