Durante el operativo para capturar al narcotraficante Ovidio Guzmán, hijo de Joaquín El Chapo Guzmán Loera, varios presuntos sicarios que trabajaban para él fueron detenidos. De ellos al menos 13 fueron vinculados a proceso y se les dictó prisión preventiva.
De acuerdo a Milenio, Octavio Alarcón Terrón, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal de Morelia, ordenó que los presuntos sicarios permanezcan detenidos en el Centro Federal de Readaptación Social Número 17 “CPS Michoacán”.
Rafael Guadalupe “E”, Jaciel Iván “L”, Edgar Eduardo “R”, Rafael Arturo “O”, Juan Antonio “R”, Rodolfo Guadalupe “D” y Jesús Esteban “V” fueron imputados por el presunto delito de portación de armas de fuego, posesión de cartuchos y posesión de cargadores; material de uso exclusivo del Ejército.
A los seis restantes, Miguel Alejando “D”, José Ángel “S”, Rafael “R”, Jaime “S”, Abraham “M” y Carlos Jeovanny “C” se les agregó el delito contra la salud.
Los presuntos sicarios, detenidos junto a El Ratón la madrugada del pasado 5 de enero, en el poblado de Jesús María, Culiacán, permanecerán en Buenavista Tomatlán, mientras su proceso continúa.
Recordamos que aquel día fueron detenidas un total de 21 personas, dejando un saldo de 29 heridos —10 militares—, y más de 35 heridos.
Ovidio Guzmán fue traslado a la Ciudad de México y actualmente permanece recluido en el Centro Federal de Readaptación Social (Cefereso) número 1, en Almoloya de Juárez, estado de México. El hijo de El Chapo continúa luchando por no ser extraditado a Estados Unidos, donde buscan juzgarlo por tráfico de drogas. RM
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