Un estado de emergencia sanitario que limita la vida nocturna en Tokio y otras regiones japonesas llegará esta semana a su fin, anunció el primer ministro Yoshihide Suga, ante un declive de contagios de Covid-19 en todo el país.
Las medidas de emergencia en general limitan la venta de alcohol, los horarios de apertura de restaurantes y el número de asistentes a eventos grandes, y han estado vigentes gran parte del año, incluso durante las Olimpiadas.
Suga dijo que las medidas no serán renovadas cuando vencen a fines de septiembre, gracias a una mejor situación sanitaria. “Gracias al buen trabajo de todos, el número de contagios diarios, que estuvo arriba de 25 mil en agosto, cayó a mil 128 personas ayer (lunes)”, sostuvo.
Agregó que “la ocupación de camas de hospitales en todas las regiones volvió a menos de 50%. El número de enfermos graves alcanzó su nivel máximo a inicios de septiembre y desde entonces viene cayendo”.
Pero incluso con el fin de las medidas, el gobernante recomendó que bares y restaurantes cierren a las 21:00 horas locales.
Japón ha sido menos golpeado que muchos otros países por la pandemia, con alrededor de 17 mil 500 muertos entre su población de 125 millones, y el gobierno nunca impuso órdenes estrictas de permanecer en casa. Aún así, la contagiosa variante Delta provocó un aumento de casos que presionó a los hospitales.