Decenas de videos tratan de inundar las redes sociales desde el domingo. En ellos se ve a personas de todas las edades marchando por las calles, otros más defendiéndose de la embestida de policías. Otros más arrojados en donde las mujeres se recortan el cabello, aparecen maquilladas o en los que queman sus velos y bailan alegres o los dejan que vuelen al viento. Todos tienen algo en común: son una protesta en exigencia por los derechos de las mujeres en Irán.
El enojo de hombres y mujeres se desató en las calles en Teherán y en el Kurdistán iraní, por la muerte de una joven detenida por los agentes de la llamada policía moral. Se extendieron muy pronto las protestas en la provincia de Kurdistán, en las localidades de Divandareh, Saqqez y Dehglan.
La reacción de las autoridades ha sido calificada de excesiva y violenta por la comunidad internacional, pues hay tres personas muertas y hasta este martes sumarían 221 heridas y 250 detenidas en la misma región.
El gobierno ha asegurado que la muerte de la joven Mahsa Amini está bajo investigación, incluso ha difundido videos en los que se supone aparece en la estación de policía y colapsa por infarto. Pero esto se ha puesto en duda, pues las imágenes de su rostro, tras morir en un hospital (tres días después de permanecer en coma), confirmaría que sí fue golpeada contra un vehículo de la policía, como aseguran defensores de derechos humanos y la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos.
Dato. La Gasht-e Ershad es la agencia encargada del cumplimiento del código de conducta islámico.
La policía moral es la encargada de hacer respetar el estricto código vestimentario de la República islámica para las mujeres, en particular el porte del velo en público que es obligatorio en público en Irán desde la revolución islámica de 1979, que puso fin al régimen del Sah.
Las protestas ciudadanas ya han provocado una toma de posición inusual, un parlamentario iraní criticó a la policía moral, cuyas acciones son controvertidas. “La Gasht e Ershad (patrulla de la moral) no obtiene ningún resultado, excepto causar daños al país”, dijo el diputado Jalal Rashidi Koochi a la agencia de noticias ISNA.
Y añadió: “¿Las personas que son conducidas por esta unidad a estas ‘sesiones de explicación’ recuperan la conciencia y se arrepienten cuando salen?”.
El presidente del Parlamento, Mohammad Bagher Ghalibaf afirmó a la agencia oficial Irna que “para evitar la repetición de tales casos”, como el de la joven fallecida, “los métodos utilizados por estas patrullas deberían ser revisados”.
Aunque en general los fieles al régimen iraní, como el gobernador del Kurdistán, Ismail Zarei Koosha, habló de tres muertes “sospechosas” en las manifestaciones, y “complot fomentado por el enemigo”.
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