Los pronósticos sobre la alta inflación apuntaban a que el fenómeno alcanzara su punto máximo en abril o mayo de este año; sin embargo, los precios continuaron ascendiendo y marcaron un nuevo máximo de 21 años durante junio, y todo apunta a que en julio suceda lo mismo.
El Banco de México, en sus minutas de la pasada reunión de política monetaria, revela que se han generado dudas sobre cuándo se presentará el punto de inflexión en la inflación.
Ahora se prevé que alcance un máximo en agosto o septiembre en la inflación —tanto general como subyacente— y que comience a disminuir en el cuarto trimestre de 2022.
No obstante, las propias previsiones que ha tenido el banco se han modificado al alza en 100 puntos base para el último periodo de este año, que es el resultado de los choques continuos que no se habían anticipado y que han sido persistentes en el último par de años, por lo que se generan dudas en el punto en que los precios comiencen a desacelerarse, mencionó en su informe el Banxico.
Las expectativas de la inflación de junio quedaron rebasadas con el resultado de 7.99% anual que dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Pero eso no es lo peor de esta situación, sino que se espera más inflación para el siguiente mes, la que rebasaría el 8%, aun a costa de que el gobierno federal ha mantenido relativamente contenidos los precios de los combustibles mediante estímulos económicos.
La estimación de los analistas es que esperan que la inflación subyacente continúe en la ruta del ascenso y marque 7.58% anual en julio, superior al 7.49% que se registró para junio, lo que la convertirá en la mayor en casi 22 años.
La inflación subyacente es de suma importancia porque es donde se da la formación de precios en el mediano y largo plazos debido a que se descuentan los factores volátiles y se mantienen los constantes. Ésta registra 19 meses de ascenso de manera consecutiva, y es el lapso más largo en la historia que se tiene en los registros del Inegi desde 1983, cuando la empezó a medir de manera independiente a la general.
El Banco de México indicó que la inflación subyacente está respondiendo principalmente a presiones inflacionarias provenientes del exterior sobre los precios de energéticos y de alimentos, y también a mayores costos de producción.
La administración del presidente Andrés Manuel López Obrador ha destacado que la inflación de México es menor a la que se suscita en Estados Unidos; sin embargo, ese país no aplica subsidios en los combustibles como lo hace el gobierno en nuestro país, por lo que la comparación no tiene las mismas condiciones. Según el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, las medidas de contención le han beneficiado a la economía para no llegar a una inflación cercana al 11 por ciento. MAAZ
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