El presidente de la República minimizó el explosivo crecimiento de la inflación en México en la primera quincena de abril, la cual se ubicó en 6.05% y representa el mayor incremento en 79 quincenas (desde enero de 2018) y peor, considerando que el precio de la canasta básica se refleja en un deterioro al salario mínimo de una tercera parte, considerando la variación porcentual o total a partir de los números absolutos.
De acuerdo a los datos del Inegi, los precios de la canasta de consumo mínimo aumentaron 7.51% en forma anualizada. Así, en lo que va del año, esa canasta acumuló un incremento de 4.2 por ciento; con lo cual, en siete quincenas se eliminó una tercera parte del incremento porcentual de 15% de los salarios mínimos que decretó el gobierno para 2021.
Lo anterior lo confirma el coordinador del Laboratorio de Análisis en Comercio, Economía y Negocios (LACEN) de la UNAM, José Ignacio Martínez Cortés, quien sostuvo que considerando el incremento en pesos del salario mínimo para este año se borró. El incremento fue de 18.48 pesos para llegar a 141.7 pesos diarios.
“En cuatro meses se pulverizó el aumento al salario mínimo de 15%, que en moneda nacional se traduce en un incremento de 18.4 pesos. Sólo el kilo de papa en un año pasó de 35.7 pesos a 51.9 pesos; el kilo de limón pasó de 26.9 a 35.9 pesos; el kilo de tortilla aumentó dos pesos. El aumento de la canasta básica tiene un aumento en conjunto de 28 pesos”, estimó Martínez Cortés.
En las primeras siete quincenas del año, tres veces se ha superado el objetivo máximo del Banco de México de 4.0%, cifra que se eleva a seis veces considerando lo cercano del límite (entre 3.68% y 3.84%). Esto viene a limitar el recorte de tasas objetivo de la política monetaria del banco central.
Si bien, López Obrador consideró que el repunte inflacionario “es un asunto transitorio”, la economista en Jefe de Banco Base, Gabriela Siller, indicó que la “proyección de inflación hacia el cierre del año, se ha ajustado significativamente al alza a 5.0 por ciento”.