En enero de 2018, los precios al consumidor aumentaron 0.53%, con lo cual la inflación a tasa anual bajó a 5.55% desde el nivel de 6.77% en el que cerró 2017, que fue el mayor nivel en 17 años, por un menor impacto del precio de los energéticos. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señaló que el aumento mensual obedeció sobre todo al alza en precios de gasolina y gas LP, lo que fue parcialmente mitigado por la reducción de precios en transporte aéreo y algunas frutas y verduras, como jitomate. Así, la inflación de 0.53% en el primer mes del año, prácticamente en línea con lo esperado por analistas, con lo cual a tasa anual registró una importante reducción. Esta importante reducción en la inflación a tasa anual, que se ubica en su menor nivel desde marzo de 2017, se debe a que si bien los precios de energéticos han seguido aumentando, este comportamiento ha sido de manera moderada respecto al fuerte movimiento al alza que tuvieron de enero del año pasado. A pesar de esta sensible baja, la inflación a tasa anual continuó por arriba de 4.0 por ciento, que es el límite máximo del objetivo para este año, de 3.0 por ciento, más/menos un punto porcentual. El INEGI comparó que enero de 2017, la inflación mensual fue de 1.70 por ciento, en tanto que la inflación a tasa anual se ubicó en 4.72 por ciento. DA