Un “ligero malestar” de la reina Isabel II opacó parte de las celebraciones por el aniversario 70 de su coronación y dejó la misa de su jubileo sin su presencia.
“Teniendo en cuenta el trayecto y la actividad necesaria para la misa de acción de gracias en la catedral de San Pablo, su majestad ha concluido a regañadientes que no participará”, anunció el Palacio de Buckingham.
A lo largo del reinado de la monarca se han acumulado algunos escándalos que dejaron sentir su influencia en el evento de esta tarde. Tal es el caso del príncipe Enrique y su esposa Meghan, que no fueron vistos en el balcón del palacio de Buckingham, reservado para los miembros activos de la realeza. Otro de los ausentes fue el príncipe Andrés, retirado de la vida pública tras un escándalo de abuso sexual.
Un incidente más se presentó durante el desfile militar, cuando un grupo de activistas salió al paso de los soldados como protesta por el cambio climático y el saqueo de tierras por parte de la corona en otros países. Los miembros de seguridad arrestaron a los manifestantes de inmediato, y no se reportó ningún otro evento parecido.
