“Lo que importa es cuanto amor ponemos en el trabajo que realizamos”. Madre Teresa de Calcuta
¿En qué trabajas?, ¿a qué te dedicas?, ¿tienes una empresa propia o laboras en alguna institución? Son preguntas que con el paso de años se han convertido en una tendencia casi infalible para iniciar conversaciones, sobre todo con aquellas personas que recién conocemos, sin embargo, en la actualidad son cuestionamientos que cada vez cuesta más responder.
Y es que en la actualidad día con día encontramos noticias sobre empresas multinacionales que despiden miles de empleados, que reajustan tasas de contratación o bien las pruebas para obtener un puesto son complicadas de superar.
Las constantes crisis de la última década nos han llevado a que el empleo se enfrente a un serio rezago que afecta a los diferentes sectores. De acuerdo a datos del más reciente estudio Panorama Laboral de la Organización Internacional del Trabajo la tasa de desempleo se redujo en 2022 a 7.2% en América Latina y el Caribe, luego de haber alcanzado un 8% en 2019, el año previo a la pandemia de COVID-19. Sin embargo, aún no se puede considerar esto como una victoria, ya que el mercado de trabajo regional en 2023 será complejo e incierto.
Aunque la noticia podría significar un poco de esperanza ante la situación vivida en los últimos tres años, la misma institución mencionó el pasado noviembre que la grave crisis económica provocada por la inflación y la desaceleración del crecimiento está generando una severa caída de los salarios mensuales reales en numerosos países; y es que El Informe Mundial sobre Salarios 2022-2023: El impacto de la inflación y de la COVID-19 indica que durante la primera mitad de 2022 los salarios mensuales disminuyeron en términos reales un 0,9%; la primera vez en este siglo que el crecimiento del salario real global ha sido negativo.
El panorama presentado no es alentador, y es que uno de los temas más significativos son los salarios a nivel mundial; nuestra región no se encuentra lejos de las malas noticias ya que en América Latina y el Caribe, el crecimiento del salario real descendió a menos 1.4% en 2021 y menos 1.7% durante el primer semestre de 2022.
En un mundo cada vez más globalizado y con mucha más presencia de jóvenes alrededor del mundo el tema laboral es una de las circunstancias que más preocupa y que produce inquietud, desaliento y frustración, y es que la OIT mencionó que el desempleo afecta al 19.8% de la población en México.
Actualmente concluir una carrera profesional no es sinónimo de garantía laboral; no significa que al salir al mundo profesional las puertas se abrirán de par en par, por contrario los retos son muchos más difíciles; se requiere empatía, adaptarse a un perfil, lidiar no sólo con el jefe, sino con el equipo de trabajo y los horarios que cada día parecen más complicados y menos adaptados a las necesidades de los colaboradores.
Lo complejo del problema no solo radica en la preocupación de este importante segmento, sino que el desempleo se extiende a todos los estratos sociales, es por ello que hoy es necesario que las instituciones implementen seguros y políticas que no solo requieran especialización sino además técnicos; ya que, en información del Banco Mundial, los trabajadores poco calificados suelen ser los más afectados, algo que exacerba las desigualdades persistentes en la región.
Entre muchos aprendizajes la crisis debe inducirnos a que las empresas e instituciones apuesten por perfiles comprometidos, capaces y leales que sean honestos para consigo y con la organización que representa, porque hoy aún podemos actuar.
*Analista en temas de seguridad, justicia, política, religión y educación.
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