La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés) reaccionó al plan de Gobierno federal para llevar las operaciones de carga del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA).
La organización internacional solicitó a las autoridades mexicanas el desarrollo de un plan de transición para facilitar el traslado de las operaciones como lo ha ordenado el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Peter Cerdá, vicepresidente Regional de IATA para las Américas, consideró que las aerolíneas y las cadenas de suministro de carga asociada no pueden simplemente empacar y mudarse a otro aeropuerto.
“Todo este proceso supone una complejidad y debe estar bien planificado para evitar cualquier interrupción operativa”, afirmó.
Cabe recordar que el proyecto firmado por el Presidente establece que la mudanza de operaciones se debe cumplir en un plazo de 90 días para aliviar la saturación de ambas terminales del AICM.
IAT, que representa los intereses económicos de 300 aerolíneas alrededor del mundo, rechazó que sea un plan factible. Argumentó que el AIFA tiene varias carencias, como algunas certificaciones de terceros que son requeridas por los operadores.
Asimismo, declaró que el nuevo aeropuerto no tiene el equipamiento adecuado en los almacenes de carga autorizados por la Autoridad de Aviación Civil de México (AFAC); tampoco cuenta con un sistema aduanero operativo, personal de aduanas suficiente; y el registro de agentes de carga para el AIFA.
“Ni las aerolíneas ni la cadena de suministro de carga asociada pueden simplemente empacar y mudarse a un aeropuerto alternativo”, advirtió Peter Cerdá.
La reticencia del IATA se suma a la expresada por como la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), quien opinó que para una mudanza de ese volumen se requiere al menos de 360 días. DJ
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