Ian Emanuel, de apenas 12 años, concluye maestría en biología molecular
Mientras Ian Emanuel arrasa en el mundo de la ciencia, también se destaca como un atleta de alto rendimiento, lo cual lo ha hecho famoso
Ian Emanuel González Santos, un joven superdotado de tan solo 12 años, ha dejado a todos boquiabiertos al convertirse en el biólogo molecular más joven del mundo.
Mientras arrasa en el mundo de la ciencia, también se destaca como un atleta de alto rendimiento, lo cual lo ha hecho famoso.
Ian es un apasionado seguidor del futbolista Cristiano Ronaldo y tiene dos gatos que lo acompañan en sus travesuras diarias. Cuando no está en la biología molecular, practica “parkour"; escuchar música electrónica y pop, o juega “Grand Theft Auto V”.
Este joven prodigio ha demostrado habilidades asombrosas desde muy temprana edad. A los 18 meses, ya tenía un vocabulario de adulto y a los 3 años aprendió a leer de manera avanzada; a los 6 años, los expertos descubrieron que tenía un coeficiente intelectual fuera de serie, y a los 9 años logró obtener en un solo intento los diplomas de primaria, secundaria y preparatoria para ingresar a la universidad.
El joven Ian decidió embarcarse en la emocionante carrera de Químico Farmacéutico Biólogo en el campus de ciencias exactas de la Universidad de Guadalajara.
A pesar de ser el más joven de todos, logró hacerse un lugar en medio de científicos experimentados y compañeros que le doblaban la edad; pero su sed de conocimiento no se detuvo allí, pues decidió matricularse en una maestría en Biología Molecular para profundizar en su pasión científica.
Su mamá, Sandra Santos, ha sido su gran aliada y ha buscado todos los apoyos necesarios para que Ian pueda compaginar sus estudios universitarios y de posgrado.
Ian se graduó con honores tanto en su licenciatura como en su maestría, pero su pasión por la investigación científica no se ha detenido ahí; recientemente, colaboró con un académico de su universidad en una investigación para encontrar una manera de degradar el plástico PET mediante una bacteria.
El camino de Ian no ha estado exento de obstáculos; y es que, a pesar de su brillantez, ha enfrentado el acoso escolar de sus compañeros y docentes; así como por un sistema educativo tradicional que no podía brindarle lo que necesitaba.
Ian dejó la primaria en cuarto grado y comenzó a estudiar en casa junto a su mamá. Desde que ingresó a la universidad, comenzó a entrenarse en atletismo, especializándose en las carreras de 80 y 150 metros planos. DJ
Con información de EFE
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