Hambruna, tan letal como una guerra nuclear

27 de Diciembre de 2024

Hambruna, tan letal como una guerra nuclear

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Un estudio calcula que en el peor escenario de un conflicto bélico, entre EU y Rusia, la producción mundial de alimentos disminuiría en 90 por ciento

Si se llegará a producir una guerra nuclear a gran escala entre los Estados Unidos y Rusia, más de cinco mil millones de personas morirían de hambre después del conflicto armado por el bloqueo de la luz solar que producirían el polvo y los gases residuales de las explosiones.

Esta es la conclusión principal de un análisis que hizo un equipó de científicos del Departamento de Ciencias Ambientales de la Universidad de Rutgers, quienes hicieron estimaciones para seis escenarios, cinco guerras relativamente pequeñas entre India y Pakistán y una gran guerra entre Estados Unidos y Rusia, en función del tamaño del arsenal nuclear de cada país.

La investigación calculó que, al estallar, las bombas nucleares generan grandes tormentas de fuego que dejan una gran cantidad de residuos de combustión incompleta, lo que normalmente se conoce como hollín, que al ser de color negro profundo funcionaría como bloqueador de la luz solar.

A partir de ahí, hicieron una estimación de la productividad de los principales cultivos (maíz, arroz, trigo de primavera y soja) por país, además de las afectaciones a la ganadería por el consumo de pasturas e incluso en la pesca marina mundial.

El estudio, que se publica hoy en la revista Nature Food, encontró que en su escenario más pequeño de conflicto nuclear en una guerra entre India y Pakistán, la producción mundial promedio de alimentos disminuyó en 7% en los cinco años posteriores al conflicto.

Pero en una guerra nuclear a gran escala entre Estados Unidos y Rusia, la producción promedio mundial de alimentos disminuiría en casi 90% tres o cuatro años después de la lucha.

Los cambios en la producción de alimentos inducirían una interrupción catastrófica de los mercados mundiales, señalan los investigadores. Incluso la disminución del 7% sería mayor que la anomalía más grande desde el comienzo de los registros de observación de la Organización para la Agricultura y la Alimentación (FAO) en 1961.

Bajo el escenario de una guerra más grande, más del 75% del planeta estaría muriendo de hambre en dos años, e incluso hace falta tomar en cuenta otros factores que podrían agravar esta situación.

“Por ejemplo, la capa de ozono sería destruida por el calentamiento de la estratosfera, produciendo más radiación ultravioleta en la superficie, y necesitamos comprender ese impacto en el suministro de alimentos”, dijo Lili Xia, autora principal del artículo en un comunicado de prensa.

Alan Robock, coautor de la investigación señala que el Tratado de la ONU sobre la Prohibición de las Armas Nucleares “ha sido ratificado por 66 naciones, pero ninguno de los nueve estados nucleares. Nuestro trabajo deja en claro que es hora de que esos estados escuchen a la ciencia y al resto del mundo y firmen el tratado”.