Autoridades de Estados Unidos descubrieron un túnel entre transfronterizo, que tenía ventilación, iluminación y hasta una red subterránea de rieles; medía 600 metros de largo y 9.5 de profundidad.
En el túnel que conectaba un depósito en Tijuana con San Diego, se decomisaron opioides, metanfetaminas, cocaína y otras drogas.
Aunque esta excavación existía desde hace varios meses, según “el estado de construcción avanzada observado en varios tramos”, señaló el equipo investigador estadounidense.
El descubrimiento se realizó desde el pasado 19 de marzo, y permitió incautar 590 kilos de cocaína, 39 kilos de metanfetaminas, 7.7 kilos de heroína, mil 300 kilos de marihuana y 900 gramos de fentanilo.
El túnel fue cavado cerca de un muro fronterizo de dos capas construido durante la administración de Donald Trump, lo que deja a desear sobre la insuficiencia de la magna obra del mandatario.