Guerra por el petróleo

5 de Enero de 2025

Guerra por el petróleo

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Entre 1990 y 1991, Estados Unidos y su alianza de 34 países lucharon contra Irak en la llamada guerra del Golfo. ¿El motivo? Invadir Kuwait, y desde entonces cambió la forma de la guerra en el mundo

Esta no fue una guerra más en Medio Oriente, sino el fenómeno televisivo más grande de la historia moderna hasta esos momentos, en el que además se aplicaron nuevas tecnologías que transformaron la forma convencional del ataque y la forma de invadir un territorio. La guerra de información y electrónica fueron conceptos que tomaron nueva forma. Junto con ellos se demostró que un conflicto bélico visto a través de la televisión disminuyó la conciencia de la muerte.

Economía en juego

El preámbulo de esta guerra ocurrió tras una serie de confrontaciones entre Irak e Irán:la economía del primero estaba en una situación muy difícil, al superar 70 mil millones de dólares de deuda externa que intentaba liquidar, pero a esto se sumó la tensión política con Kuwait al que acusaban de saquear el petróleo y de no respetar los acuerdos de extracción de la OPEP y de debilitar los precios del hidrocarburo.

El 2 de agosto de 1990, Sadam Husein

invadió Kuwait con infantería y vehículos de combate y el emir Yaber Al-Sabah huyó del país. En respuesta a la agresión se fraguó la coalición de 34 países encabezada por Estados Unidos. En el juego entró Arabia Saudita, que puso a disposición su territorio para una eventual invasión de Irak; en tanto Estados Unidos y Reino Unido desplazaban tropas hacia el emirato y así entrar en combate con el ejército iraquí que representaba todo un reto militar por la calidad de su armamento. De esta forma, la operación Tormenta del Desierto además de desplegar cientos de miles de hombres para derrotar a la fuerza iraquí, la cuarta más numerosa del mundo, se buscaba proteger a Arabia Saudita de posibles ataques.

Los ojos del mundo

Hace 30 años, cualquiera que tuviera acceso a una televisión podía observar desde la comodidad de su casa el poderoso despliegue militar de las fuerzas de la coalición y de Irak y con reportes en vivo.

El 11 de septiembre de 1990, un mes después de la invasión en Kuwait, el presidente de Estados Unidos, George Bush, ante el Congreso estadounidense pronunció un discurso en el que habló de un nuevo orden mundial: “una nueva época, más libre de amenazas y de terror, más fuerte en la búsqueda de la justicia y más segura en la búsqueda de la paz”.

Lo que a continuación sucedió fue una serie de acontecimientos que precipitaron aún más el conflicto. El 17 de enero de 1991 comenzó la ofensiva de la coalición, denominada Operación Tormenta del Desierto con bombardeos por cielo y mar contra objetivos militares, infraestructuras e industrias, esto anunciado a través de la agencia televisiva de noticias, CNN. Aquel día, como lo consignara el columnista Julio Llamazares en El País, en su artículo titulado “La primera guerra televisada”, a las 2:40 (hora de Irak), el corresponsal de CNN anunció a través del teléfono, desde el hotel Al Rachid de Bagdad, que la guerra comenzó. Por ello, prosigue Llamazares, “no es extraño que la televisión se haya convertido desde el primer momento de esta guerra, para la mayoría de la gente, en la principal y casi única fuente de información”.

Llegó el 24 de febrero de 1991 con la intervención terrestre, ofensiva arrolladora de la coalición; Kuwait fue retomado y tras cuatro días de combates terrestres, Irak se rindió y aceptó las condiciones de la ONU, incluso respetar la soberanía de Kuwait.

El arsenal

Frente a la Fuerza Aérea de Irak la coalición mostró su capacidad con aviones de última generación como el F-15 Eagle, el F-16 Falcon, el F-14 Tomcat, el Panavia Tornado, el F-117 Nighthawk que trabajaban en equipo con aviones de contramedidas electrónicas como el EA-6P Prowler y el EF-111A de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, considerado el mejor avión de guerra electrónica, además del E-3 AWACS, al que se le atribuyó parte del éxito de los ataques, pese a que el combate más largo fue de casi 10 minutos.

Estas nuevas formas de guerra no fueron tan precisas. Las víctimas civiles fueron demasiadas. Algunos casos más emblemáticos: El 4 de febrero, a través de reactores se destruyó un puente con transeúntes en Nasiriya, causando 47 muertos civiles y 102 heridos; para el 13 de febrero, dos misiles estadounidenses guiados por láser acabaron con un refugio antiaéreo civil de Amariya en Bagdad, que dejó 400 víctimas. Para el 14 de febrero los bombardeos por naves británicas en Faluya alcanzaron un bloque de apartamentos y un mercado lleno de civiles, causando docenas de muertos.