La invasión rusa a Ucrania ha empeorado las condiciones de desigualdad en América Latina, región que continúa en recuperación luego de la pandemia de coronavirus, y en donde algunos gobiernos no cuentan con las herramientas necesarias para hacer frente a una tormenta económica y social que pondrá en riesgo la estabilidad en algunas zonas, así lo advierte un reporte de la consultora internacional GIS.
El experto en Ciencias Políticas John Polga-Hecimovich, autor principal de este reporte, señala que “algunos líderes populistas en América Latina están recurriendo a trucos que pueden causar daños duraderos”, entre los que destaca el subsidio a las gasolinas que actualmente se aplica en México.
Aplicar subsidios a los combustibles es considerada una política inconveniente por este especialista, quien afirma que esto incentiva el robo y la reventa de gasolina en toda la región, pero destaca el caso de México, en donde esto sucede de manera común y forma parte de las principales actividades de los grupos delictivos en todo el país.
Otro riesgo de mantener los subsidios sobre los combustibles es ocasionar un desbalance entre los precios de consumo reales, lo que podría causar mayor inflación a largo plazo que se traduciría a descontentos sociales y huelgas en diversos sectores de la población.
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De hecho, Hecimovich subraya que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no “podrá pedir prestado suficientes dinero para cubrir los subsidios a los combustibles propuestos y el gasto elevado“, y agrega que la recuperación de México se encuentra íntimamente ligada a la de Estados Unidos, por lo que las relaciones comerciales de ambos países deben mantenerse en condiciones óptimas.
En cuanto a las cadenas de suministro de alimentos que se han visto afectadas por la invasión de Ucrania, el experto advierte que algunos países de la región tendrán graves problemas de abasto ya que importan más del 60% de lo que consumen, pero México debería tener un mejor panorama debido a su posición como productor primario de varios insumos.
La inseguridad alimentaria de los países del Caribe y Centroamérica podría aumentar la necesidad de migrar hacia México o Estados Unidos en los próximos meses, por lo que estos gobiernos deberán preparar herramientas suficientes para garantizar la seguridad de estas personas.
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