“Pedimos tres veces la suspensión del partido y hubo tres anuncios. Pero el partido continuó", declaró Ancelotti a la cadena Sky. Koulibaly fue víctima de gritos procedentes de la grada imitando los de un mono, en varias fases del partido. El jugador fue expulsado a un cuarto de hora del final al ver una segunda tarjeta amarilla. Su primera amonestación fue por una falta sobre Matteo Politano y la segunda por haber aplaudido al árbitro, cuando el encuentro iba 0-0. El Inter ganó luego 1-0 en el descuento final, en este duelo de la 18ª jornada de la Serie A italiana. “El jugador estaba nervioso, su humor no era el mejor. Es un jugador muy correcto y muy profesional. No es algo propio de él, pero tuvo esos gritos todo el partido”, afirmó Ancelotti. “Esto parece una excusa, pero el jugador estaba agitado, nervioso. Esto no es bueno ni para nosotros ni para el fútbol italiano”, continuó. “Hay una solución. Hay que interrumpir el partido. Simplemente hay que saber a partir de cuántos anuncios. Y si no se sabe, entonces la próxima vez seremos nosotros los que lo pararemos”, añadió el extécnico del Real Madrid y del Bayern de Múnich. EC