Golpe bajo a carga aérea
Hace unos meses, operadores de carga fueron invitados al AIFA y les preguntaron qué faltaba para que operaran desde allí. La lista fue larga, pero creyeron que trabajarían en conjunto, hasta que conocieron del decreto que ordena el cambio

TECAMAC, ESTADO DE MÉXICO, 16AGOSTO2010.- Una demostración de dos aviones CASA C-295M fueron presentados en la Base Aérea Militar No. 1 en Santa Lucia; Dichos aviones serán empleados en el transporte de tropas y apoyo logístico, con una capacidad de carga de 9 toneladas, por lo que el uso de este material aéreo permitirá incrementar las capacidades de transporte de personal, equipo y material en cumplimiento de las misiones. FOTO: RODOLFO ANGULO/CUARTOSCURO.COM
/Rodolfo Angulo
Hace unos tres meses, los operadores de carga que se ubican en la terminal aérea de la Ciudad de México acudieron a una cita convocada por el gobierno federal en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles.
Cuentan quienes conocieron de la reunión, que les mostraron las instalaciones y les preguntaron qué hacía falta para que pudieran operar desde allí, y la conclusión fue una lista, algo amplia, de elementos logísticos y técnicos que se requerían, pero todo en términos muy propositivos.
Los asistentes pensaron que, a partir de ese encuentro, trabajarían de la mano para hacer la mudanza a Santa Lucía, hasta que vieron el proyecto de decreto que ordena el cambio, lo que sintieron como un golpe bajo, especialmente de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes, que ni siquiera les avisó.